Los ejecutivos de finanzas advierten que los proyectos del ejecutivo federal deben ser más claros en los objetivos para calmar la incertidumbre en los mercados y una posible fuga de capitales.
El presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), Fernando López Macari, aclaró que el funcionamiento de nuevo gobierno se debe alinear a los programas, leyes y acuerdos ya existentes, además de generar los lineamientos y acuerdos necesarios de coordinación en la administración federal para evitar complicaciones en los objetivos.
“Lo que vemos es una dificultad en la ejecución de todas las ideas, echarle al gobierno una carga financiera tan importante como los proyectos de infraestructura de la refinería de Dos Bocas o el propio aeropuerto, en situación de finanzas públicas equilibradas, no endeudamiento adicional, crecimiento más reducido, financieramente es difícil de justificar y de entender, eso provoca alguna situación de incertidumbre”, puntualizó el presidente del Consejo técnico, Ángel García-Lascurain Valero.
López Macari enatizó que lo más preocupante es que el gobierno federal no escuche a los especialistas sobre la factibilidad de sus proyectos. “Si se insiste en construir la refinería pudiera generar una distracción para Pemex que no la necesita en este momento. Pemex necesita en concentrarse en resolver su situación financiera e incrementar la producción de barriles y no la refinación”.
Explicó el presidente del IMEF que varios proyectos presidenciales se encuentran en “polémica nacional” porque no hann tenido una comunicación adecuada con los inversionistas, actores del mercado y población en general.
Especificó que el Ejecutivo federal ha quedado a deber en el cómo se lograrán los objetivos en tiempo y costo.
“La falta de datos claros, certeros, que generen certidumbre, lo que hace es confundir y generar un ambiente de polémica e incertidumbre, y esto, sin duda, permea en el ambiente económico y financiero de nuestro país el verse frenadas las inversiones, a la espera de más datos y claridad. El verdadero peligro de esta situación es que si la incertidumbre se prolonga podría generar una fuga de capitales”.
El IMEF redujo se expectativa de crecimiento para este año al pasar de 1.5 a 1.4 por ciento. Asimismo, incrementó la expectativa de inflación de 3.80 a 3.85 por ciento y mantuvo el tipo de cambio para finales en 20.35 pesos.