El peso mexicano cerró la semana con pocos cambios, cotizó 20.11 pesos por dólar y mostró una apreciación mínima de 0.12 por ciento o 2.4 centavos.
Aunque en el balance semanal el tipo de cambio no tuvo una variación significativa, durante los últimos cinco días el peso cotizó entre un mínimo de 20.0730 y un máximo de 20.5798 pesos por dólar, nivel no visto desde junio, antes de que se llevaran a cabo las elecciones presidenciales en México.
En los primeros dos días de la semana, el peso perdió terreno como resultado de la mayor percepción de riesgo entre los participantes del mercado, ante las dudas sobre la manera en que el próximo gobierno conducirá su política económica y tomará decisiones.
En la primera mitad de la semana, la tasa de rendimiento de los bonos M a 10 años subiera 18 puntos base a un máximo de 9.10 por ciento, no visto desde 2008.
El peso también se depreció a la par de una caída de los precios del petróleo, pues el martes la cotización del WTI tocó un mínimo de 54.75 dólares por barril, nivel no visto desde 2017.
Durante los primeros días de la semana, las divisas de países productores de materias primas también registraron pérdidas, aunque de forma temporal.
A partir de la sesión del miércoles, el tipo de cambio se estabilizó alrededor de 20.50 pesos por dólar y comenzó a bajar previo a la decisión de política monetaria de Banco de México, en donde la Junta de Gobierno decidió subir su tasa de interés en 25 puntos base a 8 por ciento.
La decisión de Banxico y la postura restrictiva de su comunicado, permitió que el peso siguiera apreciándose hacia el cierre de la semana, pues existe la probabilidad de que vuelvan a subir la tasa de interés de referencia en 25 puntos base el 20 de Diciembre, en particular si aumentan los riesgos al alza para la inflación como consecuencia de una mayor depreciación del peso.
Al cierre de la semana, el peso también se recuperó al disminuir el nerviosismo relacionado con la guerra comercial entre Estados Unidos y China.
De acuerdo con Donald Trump, el gobierno de China está dispuesto a llegar a un acuerdo comercial y agregó que podría ser innecesario implementar nuevos aranceles a las importaciones de ese país. Sus comentarios provocaron que el tipo de cambio tocara el mínimo en la semana de 20.0730 pesos por dólar.
Hacia adelante, los participantes del mercado seguirán atentos a noticias relacionadas con la siguiente administración federal en México, por lo que es poco probable que el peso se siga apreciando de forma sostenida, ya que en niveles cercanos a 20 pesos por dólar se podrían observar oportunidades de compra por parte de corporativos.
Esto se debe a que se anticipa que continúe la volatilidad cambiaria hacia el cierre del año, la cual podría elevarse debido a la baja liquidez estacional.
Por otro lado, la agencia calificadora Standard and Poor’s dijo que el Presupuesto de Egresos de la Federación 2019, así como el Plan Económico de la siguiente administración serán factores clave que se analizarán para revisar o confirmar la calificación de la deuda soberana de México.
Durante la semana, el euro-peso alcanzó un mínimo de 22.7298 y un máximo de 23.2367 pesos por euro en las cotizaciones interbancarias a la venta. Por su parte, el euro tocó un mínimo de 1.1216 y un máximo de 1.1420 dólares por euro.
Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 20.1193 pesos por dólar, 1.2827 dólares por libra y en 1.1415 dólares por euro.
Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero.
Banco BASE