El combate al mercado informal de bebidas alcohólicas adulteradas y la evasión fiscal del sector se combate con un cambio en el esquema del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), afirmó el presidente ejecutivo de la Asociación Nacional de Distribuidores de Vinos y Licores (ANDIVYL), Iñaki Landáburu Llaguno.

Además, con la propuesta de gravar el grado de alcohol y no el precio del producto se evita un daño no deseado a las industrias artesanales y, principalmente, se les pega a las bebidas alcohólicas adulteradas, se apoya a las industrias artesanales y se pone un alto a la proliferación de las industrias ilegales.

Con esta modernización del impuesto se puede controlar la venta de alcohol clandestino, ya que el 35 por ciento de la comercialización informal de estos productos no paga impuestos, lo que daña al erario público.

Recordó que el año pasado se registraron 21 muertos e intoxicados que aparecieron en Tamazula y Mazamitla, Jalisco y 10 más en el estado de Puebla por consumo de bebidas adulteradas.

El presidente de ANDIVIL y ANAM, mencionó que ambas asociaciones representan el 54 por ciento de la distribución legal de vinos y licores, “y para nosotros hay dos prioridades: el piso parejo y la salud de México”.

La propuesta de pasar del modelo ad valorem al modelo ad quantum o cuota fija de 1.40 en función por cada grado de alcohol.

Especificó que al aplicar una cuota fija ad quantum por grados de alcohol por litro, el IEPS a las bebidas cervezas (sobre todo artesanales) y vinos pagarían menos, y las bebidas que hoy resultan baratas y de mala calidad, pero con alto grado de alcohol, las famosas “aguas locas”, pagarían más.

Por Miguel Ramirez

Nacido en la CDMX, egresado de la FCP y S de la UNAM. Inicie en 1992 en periodismo tecnológico y después migré a la parte económica y financiera. Aficionado a la NFL y vaquero de corazón. Otros deportes son el Basquet (Knicks), Tenis; fut de Champions League...