El tipo de cambio peso-dólar cerró Noviembre con una depreciación mensual de 4.31 por ciento u 88.7 centavos, cotizó 21.45 pesos por dólar, tocó un mínimo de 20.2517 y un máximo en el año de 22.1550 pesos, nivel no visto desde el 30 de Septiembre del 2020.
La depreciación mensual del peso fue la mayor desde Marzo del 2020, cuando el peso cayó más de 20 por ciento ante el impacto inicial de la pandemia del Covid19.
Los factores que ocasionaron la depreciación del peso durante el mes fueron la fortaleza del dólar, la depreciación de la lira turca, caída del precio del petróleo en la segunda mitad del mes e incremento de percepción de riesgo de México por la propuesta de nuevo integrante de Banco de México (Banxico).
El dólar estadounidense se fortaleció, debido a la publicación de indicadores económicos positivos para Estados Unidos, lo que alimentó la expectativa de que la Reserva Federal podría acelerar la salida del programa de compra de bonos e iniciar el ciclo de incrementos a la tasa de interés a mediados del 2022.
De acuerdo con el índice ponderado de dólar, la divisa alcanzó su menor nivel desde el 24 de Julio del 2020. Durante el mes, el índice registró un avance de 1.91 por ciento, siendo el mayor incremento mensual desde Junio.
Un factor adicional detrás del avance del dólar fue el anuncio del 03 de Noviembre de la Reserva Federal sobre el recorte inicial del programa de compra de bonos, quedando a partir de Diciembre, en un ritmo mensual de 60 mil millones de dólares en bonos del Tesoro y 30 mil millones de dólares de activos respaldados por hipotecas.
No se puede descartar un fortalecimiento adicional del dólar al considerar que se han elevado los riesgos al alza para la inflación a nivel global y en Estados Unidos, por lo que el presidente de la Reserva Federal ha señalado que podrían considerar acelerar el proceso de salida del programa de compra de bonos para concluirlo en la primera mitad del 2022.
Otro aspecto fue el efecto contagio desde otras economías emergentes. En el mes, la lira turca se depreció 40.38 por ciento, cerró en 13.4860 liras por dólar y alcanzó una cotización histórica de 13.9519 liras por dólar el día 30 de Noviembre.
Esta cotización fue la mayor depreciación mensual de la lira desde Febrero del 2001 y estuvo relacionada con la implementación de medidas de política monetaria contrarias a lo que indica la teoría económica, pues a pesar de que la inflación se ubica ceca del 20 por ciento anual, el 18 de Noviembre el Banco Central de Turquía recortó la tasa en 100 puntos base a 15 por ciento, acumuló 3 recortes desde Septiembre por un total de 400 puntos base.
Los recortes a la tasa de interés son consecuencia de la falta de autonomía de la política monetaria. Hacia final del mes el presidente turco Erdogan defendió los recortes a la tasa de interés y señaló que éstas caerán hasta las elecciones generales en 2023, lo que sembró dudas sobre el futuro de la política monetaria en ese país y ocasionó una depreciación adicional de la lira frente al dólar.
Durante Noviembre, el peso chileno se depreció 1.86 por ciento y cerró en 829 pesos por dólar, alcanzó una cotización de 849.15 pesos por dólar, nivel no visto desde Abril del 2020.
La depreciación del peso chileno, aunque estuvo lejos de ser la más profunda, está asociada con factores políticos, principalmente las elecciones generales que se definirán en una segunda vuelta el 14 de Diciembre.
Un tercer factor fue la caída en los precios de las materias primas, principalmente los precios de los energéticos.
En la segunda mitad del mes los precios de los energéticos comenzaron a retroceder en el mercado de commodities, ante la expectativa de que Estados Unidos, en conjunto con otras economías, incrementarían la oferta petrolera para reducir las presiones inflacionarias relacionadas con los precios de la energía.
Al cierre mes la caída se acentuó, después de darse a conocer que la nueva variante del Covid19, llamada Ómicron, podría no ser sensible a las vacunas actuales, lo que generó aversión al riesgo en el mercado de commodities por la posibilidad de una caída de la demanda.
En Noviembre, el precio del WTI mostró un retroceso de 19.96 por ciento, cotizó 66.89 dólares por barril, mientras que el brent perdió 16.37 por ciento y cerró en 70.57 dólares por barril.
Por su parte, el precio del gas natural retrocedió 14.98 por ciento y el precio de la gasolina 19.57 por ciento.
En el mercado cambiario, las divisas más depreciadas en el mes, después de la lira turca, fueron la corona noruega con 7.11 por ciento, el peso colombiano con 6.16 por ciento, el dólar australiano con 5.50 por ciento, el dólar neozelandés con 5.08 por ciento, la corona sueca con 5.05 por ciento, el rublo ruso con 4.58 por ciento, el peso mexicano con 4.31 por ciento y el rand sudafricano con 4.19 por ciento.
También por una mayor percepción de riesgo con respecto a México por el futuro ocupante de gobernador del Banco de México, Victoria Rodríguez Ceja, actual subsecretaria de egresos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.
Ante la confirmación de que la variante del coronavirus Ómicron, es una amenaza para la recuperación económica global, los mercados financieros reaccionaron negativamente a la noticia de que una nueva variante podría ocasionar una cuarta ola de la pandemia, pues las vacunas actuales parecen tener una efectividad disminuida.
Por ahora se han implementado nuevas restricciones de viaje, principalmente en Europa. El impacto de la variante sobre los mercados financieros dependerá de los estudios que siguen en curso sobre la efectividad de las vacunas y el crecimiento en el número de contagiados a nivel global durante Diciembre.
En el mes, el euro tocó un mínimo de 1.1186 y un máximo de 1.1617 dólares por euro. Por su parte, el euro peso tocó un mínimo de 23.3512 y un máximo de 24.9632 pesos por euro.
Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 21.4520 pesos por dólar, 1.3297 dólares por libra y en 1.1336 dólares por euro.
Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero
Banco BASE

