Los gobiernos en México, a nivel federal, estatal y municipal deben avanzar para contar con estadísticas reales sobre la disposición en los hogares para evitar sequías en las finanzas familiares y personales que superan hasta en 7 por ciento la cifra recomendada por la Organización de Naciones Unidas (ONU) para satisfacer el consumo del vital líqudo.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) señaló que en el territorio nacional hay diferencias muy grandes en cuanto a la disponibilidad de agua.
Las zonas centro y norte de México son, en su mayor parte, áridas o semiáridas: los estados norteños, (Baja California, Baja California Sur, Coahuila, Chihuahua, Nuevo León, Sonora y Tamaulipas) reciben apenas el 9 por ciento del agua renovable al año.
En el caso de las entidades del sur-sureste (Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Campeche, Quintana Roo, Yucatán, Veracruz de Ignacio de la Llave y Tabasco) es lo contrario, éstas reciben más de la mitad del agua renovable al año con 67.2 por ciento, pero sus habitantes tienen menor acceso al vital líquido, pues no cuentan con los servicios básicos, como es agua entubada dentro de la vivienda.
Puntualizó el Inegi que en el Valle de México se encuentra la disponibilidad anual más baja de agua con apenas 144 m³/hab; mientras que en la frontera sur supera los 18 mil m³/hab.
Debido al crecimiento de la población, la disponibilidad de agua ha disminuido de manera considerable: en 1910 era de 31 mil m³ por habitante al año; para 1950 había disminuido hasta un poco más de 18 mil m³; en 1970 se ubicó por debajo de los 10 mil m³, en 2005 era de 4 mil 573 m³y para 2019 disminuyó a 3 mil 586 m³ anuales por cada mexicano.
El Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO) estima que para 2030, esta disponibilidad en México descienda debajo de los 3 mil m3 por habitante al año.
Para el 2030 se espera que el uso del agua aumente en un 40 por ciento gracias a una combinación de factores como el cambio climático, la acción humana y el crecimiento demográfico, aunque en día ya es excesivo en algunas ciudades, de acuerdo con ONU/Habitat.
En México es indudable que estamos ante una crisis hídrica: 60 por ciento de los cuerpos de agua presenta algún grado de contaminación, 157 acuíferos están sobreexplotados, además de que 50 por ciento del territorio ha perdido su cobertura vegetal original, destacó el coordinador técnico de la Red del Agua UNAM y director del Centro Regional de Seguridad Hídrica, Fernando González Villarreal.
El documento Indicadores de derechos humanos al agua y al saneamiento de 2023 reveló que apenas se supera el 75 por ciento en cuestones de accesibilidad, en cuestiones de aceptabilidad supera el 25 por ciento y en cuestiones de calidad supera el 50 por ciento.
El documento expone que los derechos del agua y el saneamiento no refleja la situación real de las poblaciones rurales y/o marginadas porque el abastecer a estas comunidades resulta “muy complicado” y agregó que los datos federales y estatales “invisibiliza las realidades locales y abona al desbalance de las comunidades urbanas y rurales y se ve en el porcentaje de viviendas sin agua entubada que es de 6.6 por ciento a nivel nacional, pero en localidades de Jalisco y Oaxaca se incrementa y llega hasta un 88.2 por ciento”.
La población en México que compra agua embotellada es del 80 por ciento, y un 1 por ciento de agua purificada en el hogar, como fuente de agua potable, informó el Instituto para el Agua, el Medio Ambiente y la Salud de la Universidad de Naciones Unidas (UNU-INWEH).
La ONU sostiene que el gasto familiar en el consumo de agua no debe ser mayor al 3 por ciento y el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) apuntó que los hogares es de un 5 a 10 por ciento mensual.
En cada en cada hogar mexicano se consumen en promedio 4 litros de agua embotellada por día y al menos 80 garrafones al año.
De acuerdo con la Procuraduría de la Defensa del Consumidor (Profeco) en 2023 una compra del servicio de pipa fue superior a los mil pesos a nivel nacional en promedio, ya hubo regiones menores a los 800 y otras superiores a los 3 mil pesos.
El estudio de mercado de agua embotellada en México de la consultora EMR alcanzó un valor de alrededor de 17.2 mil millones de dólares (mdd) en 2023. Se anticipa que el mercado objetivo crezca un 3.90 por ciento entre 2024 y 2032, para alcanzar un valor de alrededor de 24.27 mil mdd en 2032 y los principales jugadores son: Danone S.A., The Coca-Cola Company, PepsiCo, Inc., Nestlé SA, Keurig Dr Pepper Inc., Agua, Vida Y Nutrición, S.A. De C.V., y The Keith Corporation, entre otras .
Las principales causas de crecimiento se encuentran en la desconfianza en la calidad del agua, el creciente número de turistas aumenta la demanda de agua embotellada, en hoteles, restaurantes, y aeropuertos, además, del interés de la gente por las actividades de fitness.