Organismos empresariales hicieron un llamado al Gobierno Federal y al del estado de Tamaulipas, para trabajar conjuntamente en la solución del problema laboral que afecta a 45 empresas maquiladoras de la ciudad de Matamoros.

La petición fue hecha particularmente a las Secretarías del Trabajo y Previsión Social (STyPS) y de Gobernación (SEGOB), así como al Gobierno de Tamaulipas, a fin de resolver este conflicto laboral que en los últimos días ha puesto en riesgo a la economía de la región, la continuidad de proyectos empresariales y más de 40 mil empleos.

El exhorto se hizo mediante un comunicado, emitido conjuntamente por el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), la Confederación de Cámaras Industriales de los Estados Unidos Mexicanos (CONCAMIN), el Consejo Nacional de la Industria Maquiladora y de Exportación (INDEX), la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) y la Cámara Nacional de la Industria del Hierro y el Acero (CANACERO).

Los empresarios e industriales detallaron que desde la semana pasada, los trabajadores de más de 40 empresas maquiladoras de Matamoros entraron en huelga, “tras hacer demandas de incrementos y bonos inaceptables e imposibles de asumir por parte de la mayoría de las empresas afectadas, a partir de una interpretación errónea de la publicación, el 26 de Diciembre pasado, del Decreto de aumento al Salario Mínimo establecido para la zona fronteriza”.

Afirmaron que la Junta Local de Conciliación y Arbitraje (JLCyA) declaró incompetencia para 13 empresas del sector automotriz y las turnó a la Junta Federal.

“Asimismo declaró huelga inexistente en 16 empresas adicionales, lo que implica que deben reiniciarse las actividades”.

Sin embargo, denunciaron que “grupos de personas ajenas a los sindicatos de las propias empresas, y con intereses no claros, han estado bloqueando el acceso de los trabajadores y el restablecimiento de los trabajos”.

Bajo este panorama, subrayaron que tras varios días de huelga, una parte de las empresas han debido aceptar las altas demandas a fin de no incumplir con los contratos asumidos como proveedores de la industria automotriz, –en muchos casos de carácter internacional–, lo que traería consecuencias desastrosas para la propia continuidad de la fuente de trabajo.

Enfatizaron que el conflicto aún persiste en una gran cantidad de empresas, “lo que pone en jaque la continuidad de los proyectos productivos; el dinamismo de la economía y la generación de empleo de la región”, y subrayaron que el INDEX estima una pérdida de 50 millones de dólares por día.

“Hacemos un enérgico llamado a las autoridades Federales y Estatales para mediar en la consecución de acuerdos razonables y equitativos, y de esta manera proteger y promover el empleo.

“Asimismo, los instamos a colaborar para que se eviten interferencias de actores ajenos al conflicto; sindicatos o grupos que persiguen fines individuales o políticos, y que no deben inmiscuirse en el diálogo entre cada empresa y sus trabajadores”, concluyeron los empresarios.