Más del 60 por ciento de las empresas familiares se encuentran en riesgo de mantener su continuidad por la falta de institucionalización, aunque confían en superar la crisis de la pandemia, reveló un estudio del Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa (Ipade).
El estudio de “Nivel de progreso de las Empresas Familiares para lograr su continuidad y armonía”, cuya actualización fue presentada por el Centro de Investigación para Familias de Empresarios, CIFEM–BBVA del IPADE Business School, reveló que las empresas en México son 85 a 95 por ciento familiares y generan entre un 70 a 80 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) y de un 70 a 90 por ciento de empleo.
En el estudio realizado entre 430 empresas se detectó que tienen confianza en salir adelante, ya que para 69 por ciento sus ventas han mejorado en los últimos tres años y para un 70 por ciento su patrimonio ha crecido en los últimos tres años.
Un 82 por ciento de los encuestados manifestó tener confianza de que la familia empresaria logrará salir adelante.
Sobre la pandemia y sus efectos, indicaron el 76 por ciento que la unión familiar fungió como factor de impulso para enfrentar los desafíos y un 72 por ciento que la adversidad ha servido para unir a la familia.
Sin embargo, los desafíos para las empresas no son la crisis sanitaria y económica, sino la institucionalización, los procesos y procedimientos internos que permitan a la organización mantener su sobrevivencia.
El 61 por ciento tiene un riesgo inminente por no contar con los temas que permitan definir los procedimientos y procesos de la empresa, sólo un 10 por ciento se encuentra preparada en el tema y un 29 por ciento requiere trabajo en varios frentes.
El informe confirmó que la sucesión y la institucionalización se mantienen como las grandes tareas pendientes en las empresas familiares.
El 48 por ciento no tiene definido sus procesos sucesorios y sólo 7 por ciento lo tiene en sus planes de gobierno.
El gobierno corporativo es inexistente en un 60 por ciento de las empresas familiares. Solo un 10 por ciento lo tiene claro y funcionando, de acuerdo a las recomendaciones de mejores prácticas corporativas.
También se detectó que el 73 por ciento de las empresas consultadas tienen al frente a la primera generación, un 20 por ciento a la segunda generación y un 7 por ciento a la tercera generación al frente de la operación empresarial.
Además, 3 de 4 líderes empresariales cumple varias funciones: socio, consejero, directivo y familiar. El 94 por ciento de los líderes de la empresa son parte de la familia.
El estudio “Nivel de progreso de las Empresas Familiares para lograr su continuidad y armonía 2020” se realizó con la respuesta de 430 miembros de empresas familiares, 29 por ciento de los encuestados pertenece a la segunda generación; 32 por ciento es el fundador o fundadora; 21 por ciento pertenece a la primera generación; 8 por ciento a la tercera; 9 por ciento no es miembro de la familia y sólo 1 por ciento es de la cuarta generación o posterior.