El gobierno del presidente, Andrés Manuel López Obrador, si quiere una reactivación económica verdadera debe olvidar sus agresiones al sector empresarial, ofrecer una certidumbre real a la inversión y transparencia, destacó el sector privado.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) reiteró que el regreso a las actividades económicas y mejoría de los indicadores no significa que la economía haya entrado a un proceso de recuperación.
Para algunos observadores, el repunte de la actividad económica a partir de Junio con el reinicio de actividades, después de concluir el confinamiento sanitario, representa el comienzo de un proceso de recuperación, pero, como se mencionó antes, eso es un tanto optimista, consideró el sector privado.
El gobierno federal se ha caracterizado por mensajes confusos, cambios en las reglas del juego para la inversión, falta de transparencia y ataques de varias formas a las empresas y a la iniciativa privada. Sin duda, ello ha generado incertidumbre y desconfianza y hasta ahora no parece haber indicios de un cambio de rumbo.
“El actual gobierno continúa asignando culpas a gobiernos anteriores de los males que aquejan actualmente al país. Parecería no percatarse que el contexto en el que se mueve el país y el mundo entero cambió radicalmente”.
El CEESP enfatizó que más allá del presupuesto de egresos e ingresos a presentarse próximamente, es imprescindible que el gobierno adopte una actitud congruente con la recuperación económica, un discurso reconciliatorio y amigable hacia todos los sectores y, muy importante, una posición más abierta a la inversión productiva en todos los sectores que el que ha sostenido.