El grado de inversión de México sufre un deterioro, pero no se perderá en los siguientes 18 meses porque tiene fortalezas y espacios fiscales, afirmó la agencia calificadora Moody´s.
La analista senior de gobierno soberano, Ariane Ortiz-Bollin, señaló que para el año entrante prevén un crecimiento de 3.7 por ciento y que los niveles de previos a la pandemia se recuperen dentro de 3 años, es decir, después del 2023.
Destacó que la recuperación de México será más lenta en comparación con naciones de un desarrollo similar por menores ingresos y recursos para atender las cuestiones que demanda la actividad económica y sociedad en su conjunto.
Agregó que las cuestiones de austeridad en el gobierno pueden afectar el perfil crediticio del gobierno por una administración menos efectiva frente a las situaciones que se presenten.
“La deuda seguirá creciendo a pesar de la austeridad, pero será más favorable con países que perdieron el grado de inversión o tienen una calificación más baja. México sigue sin tener desequilibrios macroeconómicos importantes, sigue siendo una economía grande y diversificada. No está en nuestro escenario que pierda el grado en los próximos 12 a 18 meses”.
La especialista de Moody´s que sólo “una sorpresa o algo que no estuviera contemplado” orillaría a retirar el grado de inversión que tiene 3 escalones por arriba en el grado de inversión con una calificación Baaa1.
Apuntó que las condiciones de evaluación en la post pandemia serán moderadas en la decisiones de calificación y dependerán de las respuestas para generar crecimiento o las medidas para limitar los incrementos del crecimiento.
Finalmente, indicó que si la administración López Obrador realiza una reforma fiscal no tendrá un impacto recaudatorio tan amplio como la del 2013-2014, “no veo la intención del equipo económico que vaya a poner una propuesta que lleve a ese tipo de reforma”, concluyó la analista de Moody´s.