El peso inició la sesión con una apreciación moderada de 0.29 por ciento o 5.6 centavos y cotizó 19.34 pesos por dólar.
Durante las siguientes sesiones es probable que el tipo de cambio cotice con mayor estabilidad cerca de los niveles actuales, a la espera del anuncio de política monetaria de Banco de México programado para el 26 de Septiembre, en el que se prevé la Junta de Gobierno recorte la tasa de interés en 25 puntos base, luego de que ayer la Fed recortara su tasa por segunda ocasión en el año.
Esta mañana la probabilidad implícita de que Banxico haga un recorte la siguiente semana se ubica cerca de 70 por ciento, mientras que la probabilidad de que haya un recorte en alguno de los últimos tres anuncios del año está cerca del 100 por ciento.
La política monetaria del Banco de México es independiente de la política monetaria de la Reserva Federal, pero el diferencial de tasa de interés con Estados Unidos es relevante para México, debido a los flujos de capitales que llegan del exterior, por lo que un amplio diferencial podría generar desbalances en los mercados financieros.
Asimismo, en México hay condiciones más propicias para un relajamiento moderado de la política monetaria, pues la inflación ha seguido su tendencia a la baja y el peso se ha apreciado durante la primera mitad de Septiembre, lo que reduce el riesgo de presiones inflacionarias adicionales.
En caso de que Banco de México recorte la tasa de interés a 7.75 por ciento, se espera que el tipo de cambio muestre una depreciación moderada, ubicándose cerca de 19.50 pesos por dólar.
Hacia adelante es probable que el tipo de cambio vuelva a moverse en función de noticias sobre las negociaciones comerciales entre Estados Unidos y China, particularmente durante Octubre.
Asimismo, los mercados estarán atentos a datos sobre el desempeño económico de México y de las principales economías del mundo, debido a que persiste el riesgo de una mayor desaceleración económica.
Este día la OCDE revisó a la baja sus previsiones de crecimiento económico global a 2.9 por ciento en 2019 y 3 por ciento en 2020, siendo las menores previsiones de crecimiento desde la crisis financiera de 2009.
Para el caso particular de México, la OCDE prevé un crecimiento de 0.5 por ciento en 2019 y de 1.5 por ciento en 2020, por debajo de las estimaciones previas de 1.6 por ciento y 2 por ciento respectivamente.
Por otro lado, este día el Banco de Japón y el Banco de Inglaterra dieron a conocer sus anuncios de política monetaria, las cuales a diferencia de la Fed y el Banco Central Europeo, mantuvieron su postura monetaria sin cambios. Por un lado, el Banco de Japón (BoJ, por sus siglas en inglés) mantuvo su tasa de interés en -0.10 por ciento, aunque señalaron la posibilidad de que en su reunión de Octubre se aumenten las medidas de estímulo.
El BoJ señaló que a pesar de la desaceleración económica que han registrado otros países, la economía japonesa continúa expandiéndose de forma moderada.
Por su parte, el Banco de Inglaterra (BoE, por sus siglas en inglés) mantuvo sin cambio su tasa de interés en 0.75 por ciento en la última reunión de política monetaria antes de que se termine el plazo oficial de salida del Reino Unido de la Unión Europea, el próximo 31 de Octubre.
De acuerdo con el gobernador del BoE, los riesgos para la economía del Reino Unido se han intensificado desde la última reunión, tales como la guerra comercial y la incertidumbre en torno al Brexit.
Además, la institución central enfatizó que un hard Brexit podría llevar a una mayor debilidad de la economía y una menor inflación.
En la sesión se espera que el tipo de cambio cotice entre 19.28 y 19.45 pesos por dólar.
Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero.
Banco BASE