El peso cerró la semana con una apreciación de 1.14 por ciento o 22.8 centavos, cotizó 19.79 pesos por dólar, el tipo de cambio tocó un mínimo de 19.6397 y un máximo de 20.2631 pesos, en el que los estímulos fiscales en la administración Biden fueron un factor relevante.
Esta fue la primera apreciación semanal desde la semana terminada el 24 de Diciembre y ubicó al tipo de cambio nuevamente cerca del soporte clave de 19.60 pesos por billete verde.
En la semana, el peso se apreció a la par de otras divisas de economías emergentes y de países productores de materias primas, como el real brasileño que avanzó 2.35 por ciento, el rublo ruso con 0.71 por ciento, el rand sudafricano con 0.55 por ciento y el peso colombiano con 0.29 por ciento.
En el balance semanal, el desempeño de estas divisas fue contrario al resto del mercado, en donde la mayoría de las monedas se depreciaron frente al dólar. Al cierre, el índice ponderado del dólar cerró con un avance semanal de 0.40 por ciento.
La apreciación semanal del peso se debió principalmente a que se ha fortalecido la expectativa de una política fiscal más agresiva en Estados Unidos que impulse la reactivación económica global, algo que beneficia particularmente a los países productores de materias primas y a los principales socios comerciales de Estados Unidos, como es el caso de México.
El jueves pasado, el presidente electo, Joe Biden, dio a conocer su plan de apoyo para impulsar la recuperación económica.
El paquete de estímulos es de 1.9 billones de dólares e incluye pagos directos por mil 400 dólares, una extensión a los beneficios por desempleo, apoyo a los gobiernos locales, entre otros.
Asimismo, propuso aumentar el salario mínimo federal a 15 dólares por hora, desde los 7.25 actuales.
La fortaleza del dólar frente a la mayoría de las divisas se debe a que persiste la incertidumbre con respecto al avance de la pandemia y a que el panorama económico de corto plazo es negativo.
También existe el riesgo de que el paquete de estímulos no sea aprobado pronto, pues podría haber oposición de los demócratas moderados en el Senado.
En sesiones posteriores no se descarta un fortalecimiento adicional del dólar, principalmente por la tendencia de las tasas de interés de los bonos del Tesoro, que se mantiene al alza.
Aunque en la semana, la tasa a 10 años mostró un retroceso de 2.3 puntos base a 1.09 por ciento, el rendimiento acumuló un incremento de 18 puntos base en el año, y el miércoles de esta semana tocó un máximo de 1.1855 por ciento, es decir, 87.2 puntos base por encima del mínimo histórico de 0.3137 por ciento del 9 de Marzo.
El peso mexicano también está en riesgo de perder terreno, pues en el mercado de futuros de Chicago, las posiciones especulativas netas a la espera de una depreciación del peso se ubicaron en 5 mil 452 contratos, cada uno de 500 mil pesos.
Desde el 24 de Noviembre al 12 de Enero, las posiciones especulativas en corto (o a la espera de que el peso se deprecie), han incrementado 60.11 por ciento o 23 mil 661 contratos. Por su parte, las posturas largas (o a la espera de que el peso se aprecie), han disminuido en 8.84 por ciento o 5 mil 586 contratos en el mismo periodo de tiempo.
La depreciación más reciente del peso parece estar motivada por un incremento en las apuestas en contra del peso y no tanto por una disminución de las apuestas a favor de una apreciación.
En la semana, el euro tocó un mínimo de 1.2076 y un máximo de 1.2230 dólares por euro. El euro- peso tocó un mínimo de 23.8344 y un máximo de 24.6284 pesos por euro.
Al cierre, las cotizaciones interbancarias a la venta se ubicaron en 19.7940 pesos por dólar, 1.3588 dólares por libra y en 1.2079 dólares por euro.
Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero.
Banco BASE