El peso mexicano cerró el año en 16.9673 pesos por dólar estadounidense, se apreció 12.99 por ciento o 2 pesos y 53 centavos, la segunda divisa más apreciada en la canasta amplia de principales cruces y la mayor en la que se tiene registro desde el régimen flexible de flotación cambiara.
El peso mexicano mostró la mayor apreciación anual desde que cotiza en régimen de libre flotación. La segunda mayor apreciación anual fue en 2012, cuando avanzó 7.77 por ciento o 1 peso y 8 centavos.
Durante el 2023, el tipo de cambio cotizó en un promedio de 17.7373 pesos por dólar, siendo la menor cotización promedio desde 2015, cuando se ubicó en 15.8810 pesos por dólar.
En el año, el tipo de cambio tocó un máximo de 19.5355 pesos por dólar el 3 de Enero y un mínimo de 16.6262 pesos por dólar el 28 de Julio, no visto desde el 3 de Diciembre del 2015.
El mes con la mayor volatilidad fue Marzo con 17.43 por ciento y el mes con la menor volatilidad fue Junio con 5.75 por ciento.
La apreciación de Enero a Julio, representó el mayor número de meses consecutivos con apreciación para el peso desde el periodo de 8 meses entre Diciembre del 2007 y Julio del 2008.
La divsa mexicana se apreció en el año debido a flujos de dólares por exportaciones, remesas e inversión extranjera directa, amplio diferencial de tasas de interés entre México y Estados Unidos y expectativa de mayor oferta de dólares en el futuro en México, por crecimiento de las exportaciones e inversión extranjera directa, ante la oportunidad del nearshoring.
Al peso también le ayudó que el sexenio está próximo a terminar y no se materializaron los riesgos de perder la autonomía del Banco de México o de perder el grado de inversión de la calificación crediticia de la deuda soberana de México.
En Septiembre, después de publicarse el Paquete Económico 2024, el peso se depreció significativamente, ante el riesgo de deterioro en la perspectiva o recorte en la calificación crediticia de México, debido al déficit presupuestario de 4.9 por ciento, el mayor desde 1988.
El crecimiento, aunque desacelerado, de las exportaciones y remesas dio fundamento a la apreciación sostenida del peso, pero fue la expectativa sobre la oportunidad del nearshoring lo que dio el mayor impulso, al punto de mostrar la mayor apreciación anual en registro, desde que se tiene el régimen cambiario de libre flotación.
Por su parte, la posibilidad de que cambiara el diferencial de tasas de interés entre México y Estados Unidos, fue lo que propició los movimientos más erráticos y la mayor volatilidad en el tipo de cambio.
Los anuncios de política monetaria de la Reserva Federal, los comentarios de sus oficiales, cambios en las proyecciones económicas y la publicación, el forward interbancario a la venta se encuentra en 16.9938 a 1 mes, 17.4249 a 6 meses y 17.9475 pesos por dólar a un año.
La menor probabilidad de recesión en Estados Unidos ocasionó en algunos meses optimismo y en otros, aversión al riesgo, por la posibilidad de una Fed más agresiva en su política monetaria.
En los meses de Agosto y Octubre el peso mexicano perdió terreno, alcanzó niveles entre 18.00 y 18.50 pesos por dólar. Las presiones al alza del tipo de cambio se debieron a que durante un breve periodo de tiempo, se reanudó la especulación de que la Fed podría volver a subir la tasa de interés, mientras que para México ya no se anticipaban incrementos de la tasa de referencia.
El 8 de Septiembre se publicó en México el Paquete Económico del 2024, en donde preocupó el incremento del déficit presupuestario a 4.9 por ciento del PIB, el mayor desde 1988 y en Estados Unidos, el 15 de Septiembre inició la huelga del sector automotriz que involucró a plantas de Stellantis, General Motors y Ford, extendiéndose hasta el 30 de octubre1 y 4) el 7 de octubre inició el conflicto entre Israel y Hamás en Palestina, ocasionando un incremento de la aversión al riesgo y acentuando las presiones al alza para el tipo de cambio.
En Noviembre el peso volvió a ganar terreno, ante señales de debilitamiento del mercado laboral en Estados Unidos, lo que permitió la especulación de que la Reserva Federal no volvería a subir la tasa de interés e inclusive podría recortar la tasa en el primer trimestre del 2024.
En Diciembre, el peso se apreció, luego de que, en su último anuncio de política monetaria del año, el Banco de México ajustó al alza su pronóstico de inflación, señalando además que existen riesgos al alza para la inflación subyacente de mercancías alimenticias y servicios.
En noviembre y diciembre las posiciones especulativas siguieron volcadas a favor del peso en el mercado de futuros de Chicago y se observó una fuerte entrada de capitales al país, reflejadas en la tenencia de valores gubernamentales en manos de residentes en el exterior.
En el mercado de futuros de Chicago, la mayor parte del año, las posiciones especulativas netas estuvieron posicionadas a favor del peso, lo que es consistente con la apreciación observada en 2023.
El año comenzó con un mayor número de apuestas brutas en contra del peso que a favor, es decir, las posturas netas estaban en contra del peso, algo que se mantuvo durante 10 semanas hasta el 7 de Marzo, cuando las posiciones brutas en contra del peso alcanzaron un máximo histórico de 208,755 contratos, cada uno de 500 mil pesos.
En la semana del 13 de Marzo, las posiciones brutas en contra del peso cayeron de forma significativa, a 81,278 contratos, permitiendo que las posturas netas subieran en 97 mil 379 contratos, su mayor incremento semanal en registro.
El peso se apreció en Noviembre y Diciembre, paralelo a la acumulación de posiciones especulativas a favor del peso en el mercado de futuros de Chicago y la entrada de dólares por regreso de capitales por mayor tenencia de valores gubernamentales por parte de residentes en el exterior.
En noviembre y diciembre, las posiciones especulativas netas a la espera de una apreciación del peso se incrementaron en 56 mil 452 contratos o 180.38 por ciento, ubicándose en 87 mil 749 contratos, cada uno de 500 mil pesos, mientras que en Noviembre entraron al país 18 mil 408.37 millones de pesos en inversión en valores gubernamentales y en Diciembre, hasta el día 19 (último dato disponible) la entrada de capitales fue por 59 mil 740.07 millones de pesos.
Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero
Banco BASE