El tipo de cambio peso-dólar cerró la sesión con una depreciación de 1.40 por ciento o 24.1 centavos, cotizó 17.42 pesos, tocó un máximo de 17.4573 y un mínimo de 17.1708 pesos por la expectativa de que las tasas de interés en Estados Unidos permanecerán elevadas por más tiempo y mayor aversión al riesgo global.
La expectativa de que las tasas permanecerán altas en Estados Unidos por un tiempo prolongado se da ante los comentarios del gobernador de la Reserva Federal, Christopher Waller, quien dijo que la Fed puede “proceder con cuidado”. Por su parte, la presidenta del Banco de la Reserva Federal de Cleveland, Loretta Mester, ha dejado claro en repetidas ocasiones que la tasa podría volver a subir.
Los comentarios impactaron al dólar estadounidense a fortalecerse 0.69 por ciento, de acuerdo al índice ponderado y al aumento en los rendimientos de las notas del Tesoro a 10 años de 8.2 puntos base a 4.26 por ciento.
En la canasta amplia de los principales cruces frente al dólar, la mayoría de las divisas perdió terreno, las más depreciadas fueron el florín húngaro con 2.01 por ciento; peso chileno, 1.83 por ciento; peso mexicano, 1.40 por ciento; dólar australiano, 1.32 por ciento; zloty polaco, 1.22 por ciento; rublo ruso, 1.14 por ciento; dólar neozelandés, 0.96 por ciento; corona checa, 0.94 por ciento; corona sueca, 0.94 por ciento; corona noruega, 0.86 por ciento; won surcoreano, 0.83 por ciento, y el yen japonés con 0.82 por ciento.
La única divisa que se apreció en la sesión fue el peso argentino con 0.02 por ciento.
La depreciación del florín húngaro fue impulsada por los crecientes riesgos económicos de ese país. Hungría emitió bonos en euros para cubrir el amplio déficit presupuestario, el cual se vio afectado debido a que la Unión Europea retuvo más de 30 mil millones de dólares de fondos de Hungría, por corrupción y preocupaciones sobre el estado de derecho en ese país.
Por otro lado, el Banco Nacional de Hungría (banco central de ese país) obtuvo respaldo del Banco Central Europeo para que las pérdidas puedan compensarse con ganancias futuras, en lugar de cubrirse con el gasto presupuestario de cada año. Esto con el fin de no presionar más a las finanzas públicas. Hungría no pertenece a la zona del euro, pero es miembro de la Unión Europeo, razón por la cual necesitaba el respaldo del BCE para cambiar la forma en que financiará las pérdidas de su banco central.
La sesión de este día se caracterizó por una mayor aversión al riesgo por un crecimiento económico de China menor, país cuyo sector servicios se expandió a un ritmo más lento en Agosto. Lo anterior llevó al peso chileno a ser una de las divisas que más se depreció en la sesión, pues su economía está ampliamente relacionada con la economía de China.
En la sesión, el euro tocó un mínimo de 1.0707 y un máximo de 1.0798 dólares. La libra tocó un mínimo de 1.2528 y un máximo de 1.2632 dólares. El euro-peso tocó un mínimo de 18.4856 y un máximo de 18.7141 pesos.
Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero
Banco BASE