El sistema financiero mexicano cuenta con una posición sólida y debe mantenerse atento a los riesgos detectados que se han incrementado por la incertidumbre generada por la pandemia del Covid-19 para el siguiente semestre.
El gobernador del Banco de México (Banxico), Alejandro Díaz de León Carrillo, en la presentación del Reporte de Estabilidad Financiera a Junio 2020 explicó que los principales retos que enfrenta el sistema financiero mexicano son los problemas de operatividad y liquidez que puedan enfrentar los agentes económicos; mantener el flujo de crédito que requieren las empresas, los hogares y algunos intermediarios financieros, y conservar condiciones de liquidez adecuadas, tanto en moneda nacional como extranjera.
Díaz de León Carrillo destacó que al inicio de este episodio de adversidad, el sistema financiero nacional cuenta con capital y liquidez para enfrentar mayores retos en comparación a la crisis anterior.
Señaló que los intermediarios financieros deben administrar de forma adecuada sus riesgos de mercado, de crédito y operativos que han venido en aumento.
Especificó el gobernador de Banxico que por la situación del Covid-19 en los mercados se registró un incremento en la reducción-salida de capitales extranjeros en renta fija, la más “pronunciada en comparación con crisis recientes”.
Otro efecto es el deterioro del mercado cambiario con incrementos notables que han disminuido en fechas recientes.
Asimismo, otra afectación la sufrirá el empleo en el sector privado y los sectores empresariales ligados a las actividades más vulnerables. Detalló que la morosidad en el sector pyme se incrementó a 6.48 por ciento.
En la Encuesta de Percepción sobre el Riesgo Sistémico se incrementó en 10 puntos el deterioro sobre la calificación crediticia soberana de México al pasar de 29 a 39 puntos y la política fiscal, económica y financiera también se deterioro al pasar a 49 puntos de los 45 de Noviembre del 2019.
El gobernador del banco central destacó que el sistema financiero nacional ha mostrado “resiliencia”, pero hacia adelante ciertos riesgos podrían intensificarse y afectar el funcionamiento adecuado del sistema financiero o bien se podrían materializar elementos de riesgo particulares en los siguientes 6 meses.
En la presente edición del reporte se analizaron cuatro riesgos para el sistema financiero: la desaceleración de la economía global y la incertidumbre asociada a su recuperación; la volatilidad en los mercados financieros internacionales y recomposición de flujos hacia activos de menor riesgo; una mayor contracción de la economía nacional y la incertidumbre sobre su profundidad y duración, y por último, ajustes adicionales a la calificación crediticia soberana y de Petróleos Mexicanos (Pemex).
El gobernador de Banxico señaló que el reporte busca que el sistema financiero cumpla con sus funciones primordiales de otorgar crédito a los agentes económicos que lo requieran para hacer frente a la emergencia sanitaria sin descuidar la solvencia económica de las instituciones del sector.