La política monetaria del Banco de México (Banxico) apoya el proceso desinflacionario que enfrenta riesgos al alza, pero se tiene el espacio para comenzar a recortar la tasa del 11.25 por ciento sin afectar su solidez para lograr la convergencia del 3 por ciento.
En la minuta 105 de la decisión de política monetaria del 14 de Diciembre del 203 la Junta de Gobierno evaluó la magnitud y diversidad de los choques inflacionarios y de sus determinantes, así como la evolución de las expectativas de mediano y largo plazos y el proceso de formación de precios, en la que destacó la necesidad mantener la tasa de referencia en su nivel actual por cierto tiempo para lograr la convergencia ordenada y sostenida de la inflación general a la meta de 3 por ciento.
Un integrante expresó que en las reuniones del primer trimestre de 2024 se puede evaluar la posibilidad de reducir la tasa de referencia, en la que habrá que proceder con cautela y detalló que el enfoque de cautela significa que los ajustes a la baja, cuando las condiciones macroeconómicas los permitan, deberán ser graduales y que las decisiones serán tales que la postura monetaria permanezca sólida para lograr la convergencia de la inflación.
Además, un miembro consideró que existen condiciones para comenzar a discutir la posibilidad de recortes en las próximas reuniones y señaló que una posible disminución mantendría una postura sólida para avanzar en la convergencia de la meta planteada.
Otro integrante señaló que el reto hacia delante consiste en ajustar el grado de restricción monetaria en un contexto desinflacionario no lineal.
Otro apuntó que se tendrá el reto de calibrar tanto la magnitud de la restricción monetaria como su duración para evitar inconsistencias temporales que afecten el mandato de un ajuste ordenado de la economía y los mercados financieros.
La mayoría de los integrantes manifestó que el panorama inflacionario continúa implicando retos en los que se mantiene un sesgo al alza, entre los que se mantienen los conflictos geoplíticos con sus repercusiones en los precios de energéticos y materias primas, los precios de los alimentos y los servicios.
La próxima reunión de los 5 integrantes de la Junta de Gobierno es el próximo 08 de Febrero de este 2024 para el anuncio de política monetaria.
La Junta de Gobierno vigilará estrechamente las presiones inflacionarias, así como todos los factores que inciden en la trayectoria prevista para la inflación baja y estable al tomar en cuenta el avance del proceso desinflacionario.
Por último, un integrante externó que hacia delante las previsiones más recientes sugieren que en 2024 el crecimiento económico seguirá siendo robusto, con lo cual se consolidaría una de las expansiones más largas de los últimos años.