El tipo de cambio peso-dólar inició la sesión con una depreciación de 0.79 por ciento o 15.9 centavos, cotizó 20.33 pesos, tocó un mínimo de 20.1606 y un máximo de 20.3789 pesos, ante un fortalecimiento generalizado del dólar estadounidense frente a sus principales cruces.

El peso mexicano es la séptima divisa más depreciada esta mañana, después del real brasileño con 1.80 por ciento, el rand sudafricano con 1.32 por ciento, la libra esterlina con 1.10 por ciento, el dólar australiano con 0.99 por ciento, el ringgit de Malasia con 0.83 por ciento y el dólar neozelandés con 0.82 por ciento.

El índice ponderado del dólar muestra un avance de 0.45 por ciento, acumulando un incremento desde el 31 de marzo del 2.91 por ciento y alcanzando hoy un nuevo máximo desde el 30 de junio del 2020.

El retroceso de la divisa mexicana se debe a cuestiones externas. La primera es una expectativa de que la Reserva Federal subirá su tasa de interés 50 puntos base en su anuncio del 4 de Mayo.

Ayer en un panel del Fondo Monetario Internacional, el presidente de la Fed, Jerome Powell, señaló que en la próxima reunión de política monetaria se discutirá la posibilidad de acelerar el ritmo de incrementos a la tasa de interés.

También porque se observó un retroceso en los precios de las materias primas, principalmente el petróleo, el WTI perdió 1.43 por ciento y cotizó 102.32 dólares por barril.

Las pérdidas en el precio del petróleo se deben a preocupaciones en torno a la actividad económica, principalmente en China, en donde las medidas de confinamiento han afectado las expectativas de crecimiento y de demanda por energéticos.

En el mercado de bonos, la tasa de las notas del Tesoro a 10 años muestra un incremento de 1.2 puntos base, ubicándose en 2.92 por ciento, acercándose esta mañana al máximo en el año de 2.9770 por ciento que es probable sea superado durante las siguientes sesiones.

Cabe recordar que las tasas de interés suben en el mercado secundario ante la expectativa de una política monetaria más restrictiva. Un incremento de la tasa de interés al vencimiento implica una caída en el precio del activo del Tesoro.

Desde finales de Febrero a la fecha, la tasa a 10 años muestra un incremento de 107 puntos base, mientras que el precio muestra un retroceso del 9.13 por ciento.

En cuanto a indicadores económicos, en la primera quincena de abril la inflación en México se ubicó en una tasa anual de 7.72 por ciento, su mayor nivel desde la segunda quincena de enero del 2001 (7.86 por ciento). A tasa quincenal, la inflación se ubicó en 0.16 por ciento. Si bien esto pareciera ser bajo en comparación con las primeras seis quincenas del año que la inflación promedió 0.45 por ciento, hay que recordar que se debe a un efecto de ajuste en tarifas de energía eléctrica al interior del componente no subyacente. Haciendo la comparación con quincenas iguales, la inflación de 0.16 por ciento es la más alta desde la primera quincena de abril del 2002.

El componente subyacente, que determina la trayectoria de la inflación general en el mediano y largo plazo, continuó reflejando presiones inflacionarias significativas. A tasa anual, se ubicó en 7.16 por ciento, su mayor nivel desde la primera quincena de enero del 2001 (7.43 por ciento), acumulando 15 quincenas consecutivas de incrementos. A tasa quincenal, se ubicó en 0.44 por ciento, su mayor nivel para la primera quincena de abril desde 1999. Es importante mencionar que, en el componente subyacente, la inflación quincenal de 0.44 por ciento es superior al promedio de las primeras seis quincenas del año que fue del 0.36 por ciento. Al interior, se destaca el componente de mercancías alimenticias con una inflación quincenal de 0.58 por ciento, y una inflación anual de 10.68 por ciento.

Entre los genéricos de mercancías, se destacan los incrementos quincenales en los precios del pan blanco (+2.62 por ciento quincenal), medicamentos para alergias (+2.41 por ciento), pasta para sopa (+1.98 por ciento), harinas de trigo (+1.94 por ciento), desodorantes personales (+1.92 por ciento), aparatos eléctricos de cuidado personal (+1.91 por ciento) y maíz (+1.91 por ciento). De estos siete genéricos, cuatro están relacionados con los precios internacionales del trigo o del maíz. Por su parte, entre los servicios, destacaron los incrementos quincenales en servicios turísticos de paquete (+9.36 por ciento), transporte aéreo (+2.62 por ciento), hoteles (+2.23 por ciento), cine (+1.31 por ciento) y autobús foráneo (+1.25 por ciento), debido a una mayor demanda relacionada con el periodo vacacional de Semana Santa.

Finalmente, la inflación no subyacente se ubicó en una tasa anual de 9.38 por ciento y una tasa quincenal de -0.66 por ciento. Si bien ya era esperada la disminución quincenal y fue mayor que hace un año (-0.28 por ciento), entre 2017 y 2019 la disminución en periodos iguales promedió 1.41 por ciento. Esto indica que, a pesar de la disminución en tarifas de electricidad, hay otros genéricos que presionan al alza al componente no subyacente. Al interior del componente no subyacente, los energéticos mostraron una disminución quincenal del 2.39 por ciento, mientras que los agropecuarios un incremento quincenal del 0.65 por ciento, impulsado por las frutas y verduras (+0.38 por ciento) y los productos pecuarios (+0.87 por ciento).

Por genérico, las tarifas de electricidad bajaron 12.31 por ciento, mientras que el gas LP bajó 1.75 por ciento en la quincena, pero la gasolina de alto octanaje subió 0.66 por ciento y la de bajo octanaje subió 0.80 por ciento, manteniendo su tendencia al alza. Entre las frutas y verduras, el jitomate subió 16.65 por ciento quincenal y el chile serrano subió 15.16 por ciento quincenal. Por su parte, el pollo subió 1.74 por ciento quincenal, el pescado 1.00 por ciento y el huevo 0.84 por ciento.

Los datos recién publicados de la inflación hacen evidente que continúan las presiones inflacionarias, por lo que la inflación pudiera seguir una trayectoria al alza, alcanzando un nivel cercano a 7.65 por ciento durante todo abril (subiendo desde 7.45 por ciento en marzo). Hacia el cierre del año se revisa al alza la expectativa de inflación del 6.2 por ciento al 7.0 por ciento. De continuar durante el segundo trimestre las presiones inflacionarias hasta ahora observadas, principalmente en el componente subyacente, la proyección de inflación al cierre del año podría revisarse hacia un nivel del 8.0 por ciento.

Por lo anterior y sumado a la expectativa de que la Reserva Federal subirá aceleradamente su tasa de interés este año, se espera que Banco de México siga subiendo la tasa de interés objetivo y no se descarta que pueda ubicarse cerca del 9.0 por ciento al cierre del año.

Durante la sesión, se espera que el tipo de cambio cotice entre 20.25 y 20.47 pesos por dólar.

Mercado de Dinero y Deuda

En el mercado de bonos, la tasa de las notas del Tesoro a 10 años muestra un incremento de 1.2 puntos base, ubicándose en 2.92 por ciento, acercándose esta mañana al máximo en el año de 2.9770 por ciento que es probable sea superado durante las siguientes sesiones. En México, la tasa de los bonos M a 10 años muestra un incremento de 1.6 puntos base, ubicándose en 8.84 por ciento.

Mercado de Derivados

Para cubrirse de una depreciación del peso más allá de 20.50 pesos por dólar, una opción de compra (call), con una fecha de ejercicio dentro de 1 mes tiene una prima del 1.77 por ciento y representa el derecho mas no la obligación a comprar dólares en el nivel antes mencionado.
Por otro lado, el forward interbancario a la venta se encuentra en 20.4545 a 1 mes, 21.0398 a 6 meses y 21.7819 pesos por dólar a un año.

Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero
Banco BASE

Por Miguel Ramirez

Nacido en la CDMX, egresado de la FCP y S de la UNAM. Inicie en 1992 en periodismo tecnológico y después migré a la parte económica y financiera. Aficionado a la NFL y vaquero de corazón. Otros deportes son el Basquet (Knicks), Tenis; fut de Champions League...