Más de mil mujeres indígenas del Estado de México son beneficiadas por los servicios salud reproductiva y educación sexual que ofrece la Fundación Pedro y Elena Hernández.
En la celebración del Día Internacional de la mujer la fundación dio a conocer que se enfoca en la población femenina sexualmente activa del municipio de Valle de Bravo y zonas aledañas.
Se busca mejorar la calidad de vida, la salud sexual y reproductiva de las mujeres que viven en unidades rurales de Valle de Bravo a través de consulta médica especializada y la concientización y difusión de información a la población en general sobre la importancia de prevenir y atender oportunamente padecimientos relacionados con el cáncer cervicouterino y enfermedades de transmisión sexual.
También se atiende a mujeres de las poblaciones de Donato Guerra, Amanalco, Santo Tomas de los Plátanos, Temascaltepec y Otzoloapan, aunque se ha presentado la oportunidad de atender a pacientes de los estados de Querétaro, Michoacán e Hidalgo.
Los esfuerzos de la Fundación se iniciaron en el 2001 con la atención de mil mujeres al año, y para este 2018 se proyecta duplicar el número de mujeres atendidas.
Para ofrecer la atención se han equipado dos consultorios médicos, se han ampliado los horarios de atención y se han realizado caravanas a comunidades rurales alejadas y/o el pago de transporte para que las mujeres puedan acceder a los espacios donde se realizaron sus estudios.
Además de estos estudios, se desarrollan acciones complementarias como la impartición de pláticas informativas y orientación a adolescentes y padres de familia sobre temas de salud sexual y reproductiva, embarazos precoces, infecciones de transmisión sexual y métodos anticonceptivos.