- Los quesos nacionales más solicitados por el canal food service tienen oportunidad ante la medida comercial interpuesta a productos importados: Lyncott
- Durante el mundial de futbol se calcula un consumo de pizza de 34 porciones por persona: Tiendeo
- México es el segundo consumidor de pizza en el mundo, con un promedio de 120 millones de pizzas anuales: Abastur
Los aranceles puestos a quesos estadounidenses abren mercado a productos nacionales y representa una oportunidad para fortalecer la industria, mencionó Eduardo Madrazo, jefe de mercadotecnia de Lyncott, quien dio a conocer que la marca ya ha registrado solicitudes de nuevos clientes en el canal de food service para la proveeduría de este tipo de productos marcados por la medida comercial.
A esto se suma el incremento en el consumo de pizza durante la celebración de la Copa Mundial, uno de los alimentos favoritos de los mexicanos para ver la competencia deportiva :34 porciones por persona, de acuerdo con la plataforma Tiendeo, y cuyo principal ingrediente es el queso mozzarella, derivado lácteo que es uno de los más solicitados por los proveedores de restaurantes.
Actualmente México se posiciona como el segundo consumidor de pizza en el mundo, tan sólo detrás de Estados Unidos, lo que representa una demanda nacional de 120 millones de pizzas anuales mediante su comercialización en más de 30 mil pizzerías y cuyo sector presenta un crecimiento anual de 12 por ciento, de acuerdo con datos de Alimentos, Bebidas y Suministros para Hoteles, Restaurantes, Cafeterías y Catering de México y Latinoamérica (Abastur).
El rubro de las pizzerías representa el 8 por ciento del sector de restaurantes de acuerdo con este organismo, quien las incluye en el mercado de la panificación en México, con un valor este último de 15 mil millones de dólares.
De acuerdo con Euromonitor internacional, el 80 por ciento de las ventas de queso en México se realizan mediante los canales de retail y food service. Mientras que, en el caso concreto de este último, los productos más consumidos son el mozzarella y Oaxaca, ya que hasta el 80 por ciento de los alimentos preparados en establecimientos de comida contienen alguno de estos ingredientes por sus propiedades en términos de sabor, textura, humedad y elasticidad.
“El queso mozzarella es uno de los más solicitados por el food service, quien se abastece principalmente de productos importados, por lo que, ante el actual panorama comercial, el producto nacional tiene grandes oportunidades en este mercado que es uno de los principales consumidores de quesos maduros de este tipo”, consideró el vocero de Lyncott.
Para esta empresa, el queso mozzarella pizzero es uno de sus productos prioritarios, por su destacado crecimiento en ventas. Como ejemplo, logró en agosto de 2017 superar en un 60 por ciento el nivel de ventas obtenido durante el mismo mes de 2016, explicó el jefe de mercadotecnia de esta empresa 100 por ciento mexicana, quien consideró que este año nuevamente los números serán positivos, entre otros factores, por la demanda de producto durante el mundial de futbol.
Relacionado con la Copa Mundial, la Cámara de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño (Canacope Servytur) de la Ciudad de México, estima que durante el mes en que durará la mayor competencia de futbol, se registrará una derrama económica superior a dos mil 500 millones de pesos tan solo en la capital del país.
Eduardo Madrazo recordó que la Cámara Nacional de Industriales de la Leche (Canilec) también se ha pronunciado optimista, ante la medida comercial interpuesta por México a los exportadores estadounidenses que abastecen principalmente al sector de food service o restaurantes con productos muy particulares como el queso mozzarella, seguido del gouda, queso crema, Monterrey Jack y parmesano.
El vocero de Lyncott mencionó que a inicios de este año advirtieron, desde la industria lechera, sobre la importancia para el sector de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), como una oportunidad de diversificar las ventas a otros países, o en el caso contrario entrar a quite desde la cadena productiva nacional para proveer a la demanda local y disminuir la dependencia alimentaria actual que tiene el país, lo que a su vez fortalecería la producción nacional.
Finalmente, consideró que ante el actual panorama comercial con aranceles de 20 y 25 por ciento a quesos estadounidenses la industria nacional de derivados lácteos ve oportunidad para los productos mexicanos.