La Industria Automotriz en México señaló que para mejorar ostensiblemente la calidad del aire debe homologarse la verificación vehicular, renovarse el parque automotor y contar con los combustibles bajos en azufre.
El presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz, Eduardo Solís Sánchez, aseguro que si en verdad se busca avanzar en la calidad del aire en la megalópolis se debe comenzar por aplicar en todo el Estado de México la verificación vehicular.
Además, dijo que deben tomarse medidas sobre los autos móviles con holograma uno y dos porque son más contaminantes que los autos nuevos.
“Los automóviles nuevos son los responsables del uno por ciento de las partículas PM2.5. Hay que entrarle a la parte importante donde están las partículas, los hologramas uno y dos no hay cambios”.
Solís Sánchez enfatizó que un auto nuevo emite lo que significa la décima parte de las emisiones de un auto que tiene holograma dos y de 4 a 5 veces lo del holograma uno, es decir, “que 10 autos nuevos circulando emiten lo que uno si fuera holograma dos”.
El presidente de la AMIA advirtió que restringir la circulación a vehículos nuevos podría reducir los incentivos para la compra de autos nuevos o en su caso, la adquisición de un segundo vehículo para cuando no circule el otro.
Además, destacó que en 2009 se contempló “combustibles limpios con bajo azufre en todo el territorio nacional en la gasolina”. Asimismo en el diesel, lo que no ha sido incumplido por Petróleos Mexicanos (Pemex).
De contar con estos combustibles podríamos avanzar en nuevas tecnologías en los vehículos nuevos, mientras no se tengan combustibles ultra bajo azufre no se pueden incorporar las nuevas tecnologías.
“El retraso de más de una década tiene nombre y apellido, y no somos nosotros”, enfatizó Solís Sánchez.
El presidente de la AMIA señaló que la Norma Oficial Mexicana 167 que señala que los autos nuevos sólo tienen dos años de exención de la verificación vehicular y a los dos año a una verificación para posteriormente presentarse en los siguientes dos años.
Solís Sánchez solicitó incentivos e infraestructura para introducir las nuevas tecnologías en los vehículos nuevos.