Al cierre de 2018 el Producto Interno Bruto (PIB) en México habrá crecido 2.1%, mientras que para el 2019 el pronóstico se ajustó a la baja, de 2.0% a 1.7%, debido a factores de riesgo tanto internos como externos, indicó Janneth Quiroz Zamora, Subdirectora de Análisis Económico de Grupo Financiero Monex.

Al dar a conocer las perspectivas 2018-2019, explicó que entre los factores que jugarán a favor de la actividad económica están el consumo, “que empieza a mostrar signos de recuperación”, pero sobre todo el buen desempeño de la economía de Estados Unidos (EU), ya que tendrá un impacto en las exportaciones mexicanas, que en lo que va del año acumulan un crecimiento del 11.3%.

En cuanto a los riesgos para un PIB a la baja, Quiroz Zamora advirtió una mayor desaceleración de la economía mundial; que la inversión continúe disminuyendo, “y la implementación de políticas económicas que minen la estabilidad macroeconómica por parte de la nueva administración”.

Al anotar que en 2018 han aumentado los riesgos globales , en general, la especialista destacó que a pesar de que la actividad económica mundial ha mostrado signos de desaceleración, la de EU continúa registrando un fuerte dinamismo, mientras que “en México, estimamos que el PIB de 2019 crecerá 1.7%”.

Reiteró que en el contexto económico mundial han surgido riesgos que a su vez han incrementado la incertidumbre e incentivado la búsqueda de instrumentos de refugio.

Detalló que entre tales riesgos están los siguientes:

-La desaceleración económica global, “particularmente el desempeño de países desarrollados ha decepcionado, exceptuando al de EU, que ha superado las expectativas”.

-La implementación de medidas proteccionistas, ya que EU ha emprendido acciones en contra del libre comercio en todo el mundo, argumentando prácticas comerciales desleales o motivos de seguridad nacional, “lo que podría derivar en una guerra comercial”.

-La fragmentación de Europa, “ya que la afluencia de migrantes no europeos ha aumentado el sentimiento populista que rechaza la integración económica y política”.

-La fase avanzada del ciclo económico en EU, “pues se empiezan a presentar signos de calentamiento en la economía”.

-La normalización de la política monetaria de EU, “pues el encarecimiento del dinero a nivel global afectará en mayor medida a los países emergentes por dos vías: el aumento de los costos de endeudamiento y la salida de capitales”, y

-Desbalances en países emergentes, “pues el ensanchamiento de los déficits en cuenta corriente puede generar correcciones severas, lo que a su vez podría contagiar a otros países y frenar el crecimiento económico mundial”.

Panorama para México

Respecto a México, Quiroz Zamora reiteró que durante los tres primeros  trimestres de 2018, la economía ha crecido a un paso moderado, beneficiada principalmente por el avance de las exportaciones y el consumo, mientras que la inversión continúa deprimida.

En torno a las finanzas públicas, dijo que a pesar de que la austeridad fiscal implementada durante los últimos años ayudó a revertir la tendencia de la deuda pública, “ésta presenta el mayor avance de las últimas 3 administraciones”.

En cuanto al PIB insistió en que este año crecerá 2.1%, y en 2019, 1.7%, mientras que con respecto a la inflación general, anotó que la tendencia descendente que presentó durante el primer semestre del año se detuvo, debido a los incrementos en el precio de algunos productos agropecuarios y energéticos, con lo cual pasó de 4.51% en mayo a 5.02% en septiembre.

“Para el cierre de 2018, esperamos que la inflación se ubique en 4.50%, mientras que para 2019 la estimación es que cerrará en un nivel de 4.0%”, destacó al precisar que los riesgos para este pronóstico son los siguientes:

Presiones en el precio de algunos energéticos y de algunos productos agropecuarios; una mayor depreciación cambiaria, y el escalamiento de medidas proteccionistas que derive en tarifas adicionales a la importación.

“Por lo anterior, esperamos que Banco de México (Banxico) incremente la tasa de referencia en 25 puntos base (pb) durante la reunión de diciembre, dado el aumento que realizará la Reserva Federal (Fed), y las presiones que la depreciación del peso pudiera tener sobre el precio de algunas mercancías, con lo que la tasa cerraría el año en 8.00%, mientras que para el 2019 no se prevén cambios”.

Con relación al tipo de cambio, precisó que se revisó a la alza la previsión para el cierre del presente año a 19.80 pesos por dólar, –desde un nivel previo de 19.00–, aunque para el 2019, estimó que también se encontrará en 19.80 pesos, aclarando que “este pronóstico está sujeto a eventos de incertidumbre que siguen significando un riesgo para nuestra economía, como los ya descritos”.

Por otra parte manifestó que si bien  la incertidumbre asociada a la renegociación del otrora Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) ha disminuido de manera importante, “el nuevo escenario político en EU pudiera causar cambios a los acuerdos alcanzados”.

Expectativas para EU

Con respecto a la economía de EU, recordó que en el tercer trimestre del presente año repuntó, debido fundamentalmente al crecimiento del consumo y de la inversión.

Dijo que la reforma fiscal aprobada a finales de 2017 ha tenido un impacto positivo durante 2018, “mismo que podría empezar a desvanecerse a partir del 2019, lo que ha estimulado el mercado laboral, que continúa dando señales de fortaleza”.

Como reflejo de lo anterior manifestó que la tasa de desempleo alcanzó el menor nivel desde diciembre de 1969; que la creación de empleo continúa rebasando las expectativas, y que los salarios semanales por hora, aumentaron al mayor ritmo desde abril de 2009.

“En este contexto estimamos que para el 2018 el PIB de EU crecerá 2.9%, y en el 2019, 2.4%, mientras que la inflación cerrará el presente año en un nivel de 2.0% y el entrante en 2.0%.

“Para la tasa de referencia de la Fed, prevemos un incremento adicional en 2018, con lo que al cierre del año se encontrará entre 2.25% y 2.50%, mientras que en 2019 estimamos que habrá 2 incrementos más”, puntualizó Quiroz Zamora.