Los ejecutivos de finanzas en nota extraordinaria señalaron que la economía mexicana este año tendrá una caída del 4 por ciento y advirtieron que en la recuperación económica del 2021 la política fiscal tendrá que jugar un papel más relevante.
El Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF) consideró que “hasta ahora, los apoyos gubernamentales para enfrentar la situación de emergencia han sido tímidos, y sin una estrategia clara e integral”.
Enfatizó que, en particular, con el aislamiento social de esta segunda fase de la pandemia, ya muchas pequeñas y medianas empresas (pymes), sobre todo del sector servicios, resienten la drástica caída en sus operaciones y ventas, por lo que ven amenazada su subsistencia.
“Es urgente que el gobierno instrumente apoyos directos, suficientes y oportunos para atenuar el impacto sobre el desempleo que se está vislumbrando. Si bien este impacto se espera que sea temporal, en los siguientes meses muchas familias sufrirán una caída sustancial en sus ingresos para su sustento”.
Prevé que la economía se contraiga 4.0 por ciento en este 2020 con una inflación de 3.95 por ciento, un tipo de cambio de 23 pesos por dólar y una pérdida de empleos formales de 150 mil 500 que dejarán de cotizan en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
El IMEF enfatizó que en el sector informal este impacto será todavía más dramático.
Por otra parte, los ejecutivos de finanzas se congratularon por el trabajo conjunta de la banca mexicana con la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) para ofrecer apoyos a los usuarios de crédito al consumo, de vivienda y comerciales cuya fuente de pago se encuentre afectada por la contingencia sanitaria, lo que sin duda representará un alivio importante para muchos hogares y negocios.
El IMEF hacia adelante observa una recuperación moderada de la economía nacional, con una tasa de crecimiento proyectada de 1.55 por ciento, que para concretarse requerirá de la actuación oportuna y adecuada de la política económica, especialmente la fiscal.