México tiene que definir rápidamente su relación con China para avanzar en una relación que lo beneficie porque al momento es el gran perdedor en América Latina.
Durante la presentación del libro Efectos de China en la cantidad y calidad del empleo en América Latina, el especialista, Enrique Dussel Peters, especificó que en la región por la inversión del gigante asiático se crearon 2 millones de empleos en el período 2000-2018.
Sin embargo a México no le fue satisfactorio en materia de empleo, «es el principal perdedor al perder 340 mil empleos, es una invitación a tomar mucho más en serio la relación con China debido a que invierte en muchos países».
Agregó que no están contempladas empresas chinas para las grandes obras de infraestructura, por el contrario, se tienen referencias negativas con la cancelación del tren rápido a Querétaro, Dragón Mart y el proyecto de 350 millones de dólares (mdd) en Chicoasen 2 en Chiapas.
Explicó que hay presiones de la administración Trump, «pero la mayor razón es la autocensura, no se vaya a enojar nuestro amigo del norte».
Destacó que el capítulo 32.10 «es un capítulo antichino, es decir, cualquier miembro del T-MEC que busque iniciar negociaciones que no sea de mercado, léase, China, significa que se va a convertir en el primer club internacional en contra del gigante asiático».
Dussel Peters dijo que China tiene más de 10 años que quiere un TLC con México, hace 3 años le propuso que firme un memorándum de entendimiento en «la franja y la ruta», le propone que sea parte del Banco de Infraestructura e Inversión de Asia , y «dice mañana te hablo».
La subsecretaría de comercio exterior de la Secretaría de Economía, Luz María de la Mora Sánchez, enfatizó que si le interesa el mercado chino, «es el tercer mercado de las exportaciones mexicanas«.
Reconoció que afecta los intereses mexicanos, pero se analiza la parte complementaria de la manufactura en la que se pueden tener sinergias entre ambas naciones.
Finalmente, se coincidió por los expositores que se debe adoptar una postura firme del gobierno para entablar negociaciones con la que será la principal economía del mundo en los siguientes años.