Más del 90 por ciento de las empresas contemplan migrar sus aplicaciones a la “nube” en el periodo de 12 a 24 meses, en la que se debe contemplar la estrategia de “nubes” complementarias para no quedar fuera de línea y causar complicaciones a las organizaciones.
El estudio de La verdad en la nube, de Veritas, reveló que el 99 por ciento de las personas encargadas de la toma de decisiones de Tecnologías de la Información (TI) indicaron que sus organizaciones mudarán los sistemas a la nube en los próximos 12 a 24 meses.
Además, un 27 por ciento también espera tercerizar toda la infraestructura local a la nube pública.
En la tendencia de integrarse a la “nube” se tiene que considerar que el servicio se interrumpe más de lo contemplado por las empresas. El 36 por ciento de los encuestados esperan menos de 15 minutos de tiempo de inactividad por mes, pero la realidad, el 31 por ciento han experimentado un tiempo de inactividad de casi el doble de eso por mes al registrarse 31 minutos o más.
Ante esta situación se recomienda tener “nubes” complementarias para que las empresas no tengan pérdida de datos y las aplicaciones se mantengan en línea de manera ininterrumpida.
“Está claro que las organizaciones no comprenden la anatomía de un corte en el servicio de la nube y que la recuperación es una responsabilidad conjunta entre el proveedor de servicios de la nube y la empresa,” especificó el vicepresidente ejecutivo y director de productos de Veritas, Mike Palmer.
Además, detalló que al adoptar una actitud proactiva para poner en funcionamiento la aplicación en la nube se tienen varios beneficios: menor impacto financiero, menos pérdida de confianza de los clientes y daños a la reputación de la marca.
Finalmente, se enfatizó que el 60 por ciento de los encuestados no han evaluado por completo el costo de un corte en el servicio de la nube.