La información recabada sobre el impacto de la crisis sanitaria del Covid-19 estará incompleta por la misma crisis, ya que se pospusieron entrevistas cara a cara, lo que no permitirá dimensionar el impacto en los hogares de México, advirtió el sector privado.

El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) destacó que las cifras de desempleo en Marzo del Inegi fueron sorpresivas porque la tasa de desocupación fue la segunda menor en los últimos 18 meses con 3.26 por ciento de la Población Económicamente Ocupada (PEA).

“Este comportamiento resultó sorpresivo en un entorno en el que la actividad económica se desploma y con ello se ha perdido una cantidad importante de empleos, tanto del sector formal, como lo indican reportes de la Secretaría del Trabajo y cifras del IMSS, como del sector informal”.

Enfatizó que el hecho de que el comportamiento de la tasa de desocupación no refleje la coyuntura del mercado laboral puede estar relacionado con dos aspectos que deberán contemplarse para evitar escenarios equivocados.

Por una parte, existe la posibilidad de que algún porcentaje de la población desocupada que antes buscaba activamente un empleo, lo haya dejado de hacer ante la complejidad y cuasi imposibilidad de poder ocuparse en el corto plazo, como consecuencia de la parálisis de la actividad productiva por la crisis sanitaria y el confinamiento.

Este comportamiento es consistente con el aumento en el porcentaje de la población no económicamente activa.

Las cifras desestacionalizadas del Inegi indican que, como porcentaje de la población mayor de 15 años, la PEA en Marzo se redujo de 60.43 a 60.06 por ciento.

Si se toma como base el último dato disponible de la población total mayor de 15 años, la caída equivaldría a 353 mil personas.

Por su parte, aplicando a esa base la reducción en Marzo de la tasa de desocupación, la baja equivaldría a 253 mil personas, entonces, es posible inferir que más de la mitad de la caída de la desocupación se debió a la reducción de la población económicamente activa.

“En otras palabras, es posible estimar que alrededor de la mitad del menor desempleo en Marzo respecto a Febrero se explica por una reducción en la participación y que la otra mitad se explica por un menor desempleo”, puntualizó el CEESP.

Agregó que otra razón que pudo incidir en esta atípica disminución de la tasa de desocupación, es el cambio metodológico en el proceso de levantamiento de la encuesta mensual de ocupación y empleo, durante el periodo de emergencia sanitaria, al verse limitado el contacto directo con la población encuestada.

Esto pudo haber modificado el universo de encuestados afectando los resultados, haciéndolos no comparables y haber incidido en este resultado.

El pasado 31 de Marzo el Inegi emitió un comunicado de prensa en el que anuncia “medidas extraordinarias por el estado de emergencia sanitaria originada por el Covid-19”.

Explicó que “en lo que toca a las encuestas en hogares, para evitar las entrevistas cara a cara en vivienda que implican, se reprogramarán hasta nuevo aviso los siguientes programas de información estadística.”

-Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE).

-Encuesta Nacional de Confianza del Consumidor (ENCO).

-Encuesta Nacional de Victimización y Percepción sobre Seguridad Pública (ENVIPE).

-Encuesta Nacional de Vivienda (ENVI).

-Encuesta Nacional sobre Disponibilidad y Uso de Tecnologías de la Información en los Hogares (ENDUTIH).

-Encuesta Cognitiva de la Encuesta Nacional sobre Salud y Envejecimiento en México (ENASEM).

-Módulos sobre Eventos Culturales Seleccionados (MODECULT) y de Bienestar Autorreportado (BIARE).

Como señaló en el comunicado Inegi, la falta de información en este lapso se reflejará en la alteración de la comparabilidad histórica, o la pérdida de cobertura y de precisión de las series.

El impacto que esto tendrá, no solo en los indicadores de empleo, como ya parece percibirse, sino de los de diversos sectores y actividades, deberá ser considerado cuidadosamente al realizar el análisis e interpretación de la evolución económica en general, advirtió el sector privado.

El Inegi indicó que dará a conocer notas técnicas de los impactos específicos en los resultados de sus diversos indicadores, de tal manera que se tengan las herramientas suficientes para interpretar adecuadamente los resultados.

Sin duda, la falta de información completa hará más difícil determinar el impacto real de la crisis actual, tanto en materia de la actividad productiva como del bienestar de los hogares, concluyó el CEESP.

Por Miguel Ramirez

Nacido en la CDMX, egresado de la FCP y S de la UNAM. Inicie en 1992 en periodismo tecnológico y después migré a la parte económica y financiera. Aficionado a la NFL y vaquero de corazón. Otros deportes son el Basquet (Knicks), Tenis; fut de Champions League...