En el primer semestre de este 2023 la contratación de más de 900 mil empleados fue sin prestaciones y seguridad social, y se deberían de contemplar nuevos modelos para mejorar la seguridad laboral, enfatizó la Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos (AMEDIRH).
El primer semestre del año se registró un crecimiento en la población ocupada de aproximadamente 726 mil 884 personas, una aparente recuperación económica. Sin embargo, es relevante destacar que este crecimiento se ha concentrado principalmente en el sector informal, lo que ha llevado a un aumento en la tasa de informalidad laboral, que pasó del 54.9 al 55.5 por ciento de la población ocupada, especificó la Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos (AMEDIRH).
«El incremento en la informalidad refleja un desafío importante en la generación de empleo formal y de calidad en México».
Mauricio Reynoso Nassar, director general de AMEDIRH
En cuanto a la calidad del empleo, el crecimiento del empleo subordinado ha sido positivo, con la adición de 930 mil 979 puestos en los primeros 6 meses del año, pero se han evidenciado desafíos preocupantes, como el aumento de la población asalariada sin prestaciones, que incrementó en 913 mil 624 personas.
«La falta de prestaciones y la ausencia de contratos por escrito reflejan la necesidad de mejorar la seguridad laboral para un número considerable de trabajadores en México».
Mauricio Reynoso Nassar, director general de AMEDIRH
Al respecto, AMEDIRH recomienda reforzar las políticas de flexibilidad laboral permitiendo a los empleados elegir entre diferentes opciones de jornadas de trabajo. Esto puede incluir horarios flexibles, jornadas reducidas, trabajo desde casa o días de teletrabajo. Al brindar opciones a los trabajadores, se les da la posibilidad de ajustar su horario para adaptarse a sus necesidades personales y profesionales, lo que aumenta su satisfacción y compromiso laboral.
“Como nunca, es momento de reflexionar acerca del impacto que puede llegar a tener la contratación de trabajadores por jornadas reducidas o medias jornadas para promover la flexibilidad laboral y mejorar la calidad de vida de los colaboradores; quizá este sea uno de los aprendizajes más importantes con respecto al semestre recién finalizado”.
La AMEDIRH señaló que ahora se requiere implementar programas de capacitación y sensibilización para líderes y empleados sobre los beneficios y las mejores prácticas de la contratación de trabajadores por jornadas reducidas.
“Esto puede incluir talleres sobre gestión del tiempo, estrategias para mantener la productividad en jornadas reducidas y capacitación en liderazgo inclusivo. Al mejorar la comprensión y el apoyo a esta modalidad de trabajo, se facilita su adopción en la empresa”.
Mauricio Reynoso Nassar, director general de AMEDIRH