El peso mexicano inició la sesión con una depreciación moderada de 0.14 por ciento o 2.7 centavos, cotizó 19.71 pesos por dólar, se movió nuevamente a la par de la mayoría de las divisas en la canasta de principales cruces.
La depreciación se debe a la cautela entre los participantes del mercado pues mañana viernes será la presentación del presidente de la Fed, Jerome Powell, en el simposio de Jackson Hole.
A la fecha no se ha dado a conocer mucha información relevante por parte de la Reserva Federal desde el anuncio del 31 de Julio, y las minutas que se publicaron ayer no ofrecieron una dirección sobre el camino que seguirá la política monetaria.
Por su parte, en México se publicó la inflación de la primera quincena de Agosto, la cual sorprendió a la baja ubicándose en una tasa interanual de 3.29 por ciento, la más baja desde Diciembre de 2016.
La menor inflación se debió principalmente al componente no subyacente, que incluye los precios de mayor volatilidad, pues se ubicó en una tasa interanual de 1.81 por ciento bajando desde 3.37 por ciento en la segunda quincena de Julio.
El descenso se debió a una caída de los precios de las frutas y verduras a una tasa quincenal de 1.45 por ciento, se ubicó en una tasa interanual de 0.02 por ciento, la más baja desde Septiembre de 2018.
Aunque el principal determinante de la menor inflación general fue el componente no subyacente, también hubo una disminución de la inflación subyacente, la cual se considera la inflación medular.
De seguir la tendencia a la baja en la inflación, ésta podría cerrar el año en un nivel cercano a 3 por ciento.
Ayer por la tarde, el gobernador de Banco de México, Alejandro Díaz de León, dijo que México enfrenta un periodo de desaceleración mayor al esperado, debido a la incertidumbre asociada a factores internos y externos.
De acuerdo al gobernador del Banxico, el menor crecimiento económico se debe a la contracción de la actividad industrial y a una “cierta” desaceleración del sector servicios.
Respecto a la inflación, Díaz de León indicó que espera que la inflación regrese a la meta, pues consideró que los menores precios de energéticos a nivel internacional, derivado de una desaceleración global, mantendrán la inflación baja en las siguientes quincenas.
Sus comentarios junto con el descenso de la inflación en la primera quincena de agosto, dan la impresión de que el Banco de México podría volver a recortar la tasa de interés antes de que termine el año.
Durante la sesión, se espera que el tipo de cambio cotice entre 19.60 y 19.80 pesos por dólar.