El peso cerró Julio con una apreciación de 0.33 por ciento o 6.3 centavos, cotizó 19.16 pesos por dólar, fue de las pocas divisas entre los principales cruces del dólar que se apreció en el mes y en el año acumuló una apreciación de 2.5 por ciento o 49 centavos.
Durante la mayor parte del mes, el tipo de cambio cotizó estable entre 18.90 y 19.20 pesos por dólar, debido a la baja liquidez que típicamente se observa en verano.
La apreciación del peso se sustentó principalmente en el debilitamiento del dólar estadounidense, ante la expectativa de una política monetaria acomodaticia por parte de la Fed.
La expectativa de un recorte a la tasa de interés se elevó tras los comentarios de Jerome Powell frente al Congreso de Estados Unidos a principios del mes, en donde reiteró que la Reserva Federal usaría sus herramientas para mantener la expansión económica.
Sin embargo, la apreciación del peso estuvo limitada por factores internos como la posible recesión técnica en el primer semestre. No obstante, este día se publicó que la actividad económica creció a una tasa trimestral de 0.053 por ciento y a una tasa anual de 0.4 por ciento durante el segundo trimestre, de acuerdo a cifras ajustadas por estacionalidad.
El dato, a pesar de mostrar un crecimiento bastante moderado, al ser positivo genera mejores expectativas para la economía mexicana para el 2019. Asimismo, puede revertir la tendencia de constantes recortes en las expectativas de crecimiento.
El incremento del nerviosismo en torno a las acciones del gobierno federal por la renuncia de Carlos Urzúa, quien era visto como uno de los elementos que brindaba mayor certidumbre a la administración de López Obrador, como Secretario de Hacienda, llevó al tipo de cambio a tocar un nivel máximo en el mes de 19.3552 pesos por dólar.
Por otra parte, en el mes se presentó el plan de negocios de Pemex, el cual generó dudas sobre la viabilidad financiera en el largo plazo, y particularmente sobre su calificación crediticia y el impacto sobre la calificación crediticia de México.
Además, la posibilidad de que Banco de México recorte su tasa de interés en alguna de sus próximas reuniones, ya que la inflación subyacente sigue al alza, pero, por otro lado, el mayor diferencial de tasas de interés con Estados Unidos puede propiciar mayores entradas de inversión extranjera de cartera, y generar una mayor vulnerabilidad en la economía mexicana, en un entorno de incertidumbre por factores internos y externos.
Banco Base estima que en Agosto el Banco de México va a optar por mantener su tasa de interés, y que si la inflación baja podría darse un recorte de 25 puntos base en la tasa de interés en su reunión del 26 de Septiembre.
Este día el peso se depreció tras la decisión de política monetaria de la Fed, en donde se anunció un recorte de 25 puntos base a la tasa de interés a un rango entre 2.00por ciento y 2.25 por ciento.
Las pérdidas del peso se debieron a que el mercado había especulado sobre la posibilidad de un recorte de hasta 50 puntos base. Adicionalmente, en su conferencia posterior al comunicado, Jerome Powell indicó que el recorte a la tasa de interés no significa el inicio de un ciclo de disminuciones a la tasa.
En el mes, el tipo de cambio cotizó en un mínimo de 18.8644 y un máximo de 19.3552 pesos por dólar. El euro-peso alcanzó un mínimo de 21.0601 y un máximo de 21.8019 pesos por euro en las cotizaciones interbancarias a la venta. Por su parte, el euro tocó un mínimo de 1.1060 y un máximo de 1.1371 dólares por euro.
Gabriela Siller
Directora de Análisis Económico-Financiero
Banco BASE