El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) no consideró como suficiente la devolución en tiempo y forma del Impuesto al Valor Agregado (IVA) señaló porque han presentado toda una serie de opciones que apoyen a las empresas y el empleo y el Presidente de la República no las incorporó al plan de reactivación económica y el crecimiento puede caer hasta 10 por ciento.
El pasado 02 de Abril líderes empresariales se reunieron con el primer mandatario nacional en Palacio Nacional para proponer una serie de medidas escalonadas que permitieran reducir el impacto negativo de la crisis sanitaria y de la baja del precio del petróleo.
El Consejo Coordinador Empresarial (CCE) le propuso un programa de 90 días con medidas diferenciadas y por sector para atender las recomendaciones sanitarias con menor impacto en la economía del país, las empresas y los ingresos de los empleados.
Para el mes de Abril se propuso un programa generalizado de vacaciones pagadas, en los sectores no esenciales, para asegurar el aislamiento, u otras acciones que puedan ser acordadas entre las empresas y los trabajadores.
En los sectores críticos (aviación, hotelería, restaurantes y otros) diferir el pago de las contribuciones a la seguridad social, sin condonación.
También establecer con fondos públicos un programa de aproximadamente 100 mil millones de pesos (mdp) para que la banca de desarrollo garantice créditos a través de la banca privada con enfoque particular a micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes), con problemas de liquidez, para conservar empleos y sufragar la nómina.
Se buscaría operar con tasas de interés blandas, de acuerdo con los mecanismos utilizados por la banca de desarrollo.
Para los meses de Mayo y Junio se propuso apoyar a todas aquellas empresas que acepten el convenio de sostener empleo y salarios para el 100 por ciento por 60 días y utilizar el programa de garantías para las empresas solventes con problemas de liquidez.
Asimismo, diferir, sin condonación, las contribuciones a la seguridad social por 60 días. También diferir los pagos de impuestos de las empresas hasta 90 días sin cargo de intereses.
También la suspensión temporal de pagos provisionales del ISR propio y retenido por sueldos.
Las contribuciones diferidas a doce pagos en 2021 con un incentivo por pronto pago.
En el caso del sector primario permitir la deducción en la adquisición de terrenos que tengan como único destino el agrícola o ganadero.
También la revisión de sectores y regiones que puedan volver a operar.
En el caso del regreso a laborar de las personas infectadas y recuperadas y analizar la posibilidad para grupos de bajo riesgo sanitario.
Establecer un procedimiento expedito para agilizar la devolución de los saldos a favor de IVA aplicable durante todo el ejercicio de 2020 y compensación universal para todo el año.
Las empresas grandes se comprometen a disminuir los tiempos de pago a proveedores mipymes.
En el caso de créditos a la palabra mensuales de 25 mil pesos con un costo de 75 mil mdp para una cobertura de hasta 3 millones de personas, bajo el planteamiento actual del programa en el que el único requisito es formalización del adquirente.
Para financiar los programas se propuso utilizar caja actual del sector público y cambiar concepto de deuda neta por deuda bruta, con lo que liberarían 425 mil mdp.
También el uso de fondos de estabilización por un total de 243 mil mdp y postergar el objetivo de finanzas públicas de 2020 al incrementar temporalmente el nivel de endeudamiento hasta en 4 por ciento del PIB.
Al igual incorporar un programa de infraestructura con fondos públicos y privados, usar el remanente del crédito para asignar a cada estado un gran proyecto de infraestructura
Preparar un agresivo programa de exportaciones a Estados Unidos para sustituir importaciones chinas hacia ese país.
También la definición y anuncio inmediato de los proyectos de inversión privada en infraestructura energética.
Estos recursos servirían para sufragar gasto en salud, compensar caídas en ingreso y sentar las bases para la reactivación de la economía.
Con medidas para la contingencia económica se prevé un decrecimiento del PIB de 2.5 o quizá hasta 0 por ciento; Inflación de 3 a 5 por ciento; tipo de cambio en el rango de 21 a 22 pesos; relación Deuda/PIB de alrededor de 50% y un desempleo de 300 mil a 400 mil personas.
En caso de no optar por estas medidas se prevé un decrecimiento del PIB en un rango de 7 al 10 por ciento; Inflación entre 6 a10 por ciento; tipo de cambio de 25 pesos; relación Deuda/PIB aproximadamente 50% (mayor tipo de cambio, mayor déficit y menor PIB) y un desempleo de 800 mil a un millón de personas.
Las medidas requerían convertir el convenio en un Consejo Económico Permanente que actuara coordinadamente entre gobierno, trabajadores, sector privado y sector social.