Los empleados que perdieron su empleo en los últimos seis meses por causa de la pandemia y cotizaron en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) deberían gozar de las prestaciones de salud sin costo alguno a través de un programa emergente, propone el Partido Encuentro Social (PES) al Presidente de la República.
La senadora Sasil de León Villard solicitó al Ejecutivo Federal un programa emergente
para apoyar a quienes hayan cotizado al menos ocho semanas durante el último año en el IIMSS, bajo cualquiera de sus regímenes, con la finalidad de garantizar su derecho a la salud.
En Abril pasado, se reconoció que seis de cada 10 puestos de trabajo perdidos, bajo el marco legal vigente, ya no tienen acceso a los servicios del IMSS al no cumplir con el requisito de ocho semanas previas de cotización, mientras que cuatro de cada 10 quedaron sin seguridad social a las ocho semanas de haber perdido sus empleos.
Por la emergencia sanitaria más de un millón de personas pasaron al desempleo y quedaron en situación de vulnerabilidad, al restringirle su acceso a la salud, lo que en medio de una pandemia como la que se vive actualmente en México supone un grave problema social.
La senadora del PES Sasil recordó que, además, en México hay 16.7 millones de asalariados sin acceso a sistemas públicos de salud y, por tanto, están desprotegidos en la crisis del coronavirus.
Pero el IMSS desde Julio pasado puso a su disposición un programa vía remota para que quienes pierdan su empleo mantengan el acceso a los servicios de salud, sin embargo, «no ha tenido el alcance necesario para atender a la población en riesgo».
La legisladora enfatizó que en este contexto de la pandemia, el acceso a la salud debe estar por encima de cualquier trámite administrativo; es necesario que el IMSS, habilite hasta el fin de la emergencia a las personas que han perdido su empleo, concluyó.