La resolución del panel en materia energética de Estados Unidos contra México en el T-MEC podría tardar un año y en la administración del presidente López Obrador se podrían sufrir represalias comerciales en varios sectores, advirtió el ex negociador del Tratado de Libre Comercio (TLCAN), Kenneth Smith Ramos.
En el marco del panel T-MEC ¿cómo vamos en con las nuevas regulaciones? del XXVIII Congreso del Comce, señaló que la administración Biden no aceptará soluciones parciales con las empresas que se encuentran involucradas por los cambios realizados en materia de electricidad propuestos por el Ejecutivo Federal.
Explicó que la instalación de los paneles para resolución de controversias en el acuerdo trilateral versión 2.0 o mejor conocido como T-MEC se resuelve en un año al ver que se tarda 2 meses en establecer el panel y entre 8 a 10 meses en tener la resolución final.
“Si el resultado es desfavorable para México te puede llevar a una serie de represalias y suspensión de beneficios en muchos de los sectores: agrícola, agroindustrial, acero, electrodomésticos, básicamente productos terminados que no compitan necesariamente con productos que Estados Unidos necesita para su producción con repercusiones de miles de millones de dólares”.
Kenneth Smith Ramos, Ex negociador del Tratado de Libre Comercio
El ex funcionario federal de la Secretaría de Economía en la administración del entonces presidente Enrique Peña Nieto, destacó que este día se abordará el tema entre Raquel Buenrostro y la representante comercial de Estados Unidos que abordarán el tema energético y del maíz.
Smith Ramos apuntó que será en la administración López Obrador en la que se podrían presentar las represalias comerciales por el cambio de reglas en México en las cuestiones energéticas.
Además, destacó que México se debe sumar a las tendencias internacionales de menor utilización de combustibles fósiles para no sufrir de “impuestos de carbono”, lo que anula las ventajas arancelarias de los tratados comerciales.
El ex negociados del TLCAN consideró que para aprovechar las oportunidades del T-MEC se debería de utilizar los mecanismos de cooperación regional que se reactivaron con el presidente Biden: el Diálogo Económico de Alto Nivel (DEAN), la Cumbre de Líderes, Alianza para la prosperidad de las Américas, para que se vea a la región como un bloque único de producto y producción para competir con el resto del mundo.
El también ex negociador del TLCAN, Luis de la Calle, puntualizó que el sistema judicial mexicano debe avanzar a pasos acelerados para generar confianza en la comunidad de negocios y no se vayan a Estados Unidos a resolver sus concursos mercantiles porque en México no se resuelven.
Finalmente, Smith Ramos enfatizó que “la globalización no está muerta, lo que sucede es que los países que se unan con sus aliados, con sus principales socios van a poder enfrentar de manera los shocks internacionales, y allí es donde México, Estados Unidos y Canadá están muy bien posicionados por el T-MEC y su posibilidad de enriquecerlo en 2026”.