La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) afirmó que para lograr una lucha frontal en contra de la corrupción se tiene que consolidar el Sistema Nacional Anticorrupción (SNA) con el objetivo de complementar y optimizar las reformas estructurales.
El presidente de la Coparmex, Gustavo de Hoyos Waalther, apuntó que el funcionamiento del Sistema Nacional Anticorrupción es la más importante transformación del Estado mexicano, comparado en su momento con la creación del entonces Instituto Federal Electoral, hace casi 30 años.
Recordó que en esos momentos se tenía que dar certidumbre al proceso electoral y esa certidumbre permitió transitar de un nivel ínfimo de democracia hasta un nivel que nos llevó paulatinamente a la alternancia política, “ese es el reto que hoy tenemos, de darle certidumbre al estado de derecho”.
Destacó que si no se logra esa transformación “por mucho que avancemos en otras áreas importantes en materia de competitividad, en el área laboral o hacendaria, será un avance incompleto que se convertirá en un inhibidor, en tanto no resolvamos esa que hoy, lo digo con plena convicción, es la principal asignatura de la democracia y del estado mexicano».
Señaló que para eliminar cualquier duda sobre la lucha contra la corrupción en México, es fundamental concretar el diseño de la Fiscalía General y llevar a cabo los nombramientos pendientes para consolidar el funcionamiento completo del Sistema Nacional Anticorrupción Nacional y de los 32 sistemas locales.
“Más que un hombre o una acción, terminemos de construir ese sistema porque si no lo hacemos así realmente, va a estar en entredicho la lucha contra la corrupción”, señaló el líder patronal.
Indicó que hay una preocupación real en la sociedad, ya que no se han completado, hasta el momento, las designaciones pendientes para que de una vez por todas opere de manera integral el Sistema Nacional Anticorrupción.
El presidente de la Coparmex participó en el panel “Fortalecer el Estado de Derecho y la Integridad Pública”, junto con Janos Bertok, jefe de la división de integridad del sector público de la OCDE; Mariclaire Acosta Urquidi, presidenta del comité ciudadano del Sistema Nacional Anticorrupción; María Amparo Cazar, presidenta Ejecutiva de Mexicanos Contra la Corrupción; Eduardo Bohórquez, director general de Transparencia Mexicana y Eduardo Guerrero, de Lantia Consultores.