Los ejecutivos de finanzas advierten que el 2019 será un año de incertidumbre por las cuestiones del proteccionismo comercial y el enfoque de la nueva administración en las políticas públicas para el sexenio 2018-2024.
El presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), Fernando López Macari, explicó que los resultados electorales producen no sólo un cambio de gobierno, sino muy posiblemente, un cambio en el manejo de la política pública ante una diferente concepción del papel que juega el Estado en la economía. «En los próximos meses seguramente se darán muchas definiciones importantes que permitirán revaluar las perspectivas de la economía».
Agregó que la incertidumbre del año que se proyecta para el 2019 por varios factores: efectos relacionados con la política de nuestro país y otros relacionados con los acontecimientos internacionales que «tienen cosecuencia en nuestra moneda, inflaión y en muchos de los indicadores de nuestra economía».
El vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos, Mario Correa Martínez, especificó que «la incertidumbre se genera desde o que está pasando con la nueva política económica de Estados Unidos, los procesos como el Brexit, para los mercados financieros la expectativa es que se vayan generando condiciones cada vez más restrictivas en la medida que continúe la normalización de política monetaria de varios bancos centrales».
Enfatizó Correa Martínez que la principal integrrogante que se tiene por parte de los analistas es la aplicación de todas las propuestas de la administración López Obrador «en el presupuesto y como va a congeniar con la expectativa de que va a mantenerse la disciplina fiscal y que no se va a recurrir al endeudamiento«.
Agregaron que el entorno «es muy incierto y hay muchos temas que son difíciles de prever como la guerra comercial de Estados Unidos y China, que si continúa puede tener consecuencias muy serias para la economía, las perspectivas y los mercados».
Bajo esta panorámica el IMEF revisó a la baja el pronóstico de crecimiento para este año y el entrante. Para el 2018 pasó de 2.30 a 2.15 por ciento y para el año entrante de 2.20 a 2.05 por ciento.
En el caso de la inflación prevé que termine en 2018 a la alza, al pasar de 4.20 a 4.30, al separarse de la tendencia descendente que preveía el Banco de México (Banxico). Para el año entrante pasa de 3.80 a 3.85 por ciento.
Para el tipo de cambio el escenario es positivo al contemplar que el peso frente al dólar terminará en 19.20 pesos de los 19.50 que se tenía pronosticado el mes pasado. Para el año entrante se eleva al pasar de 19.25 a 19.45 pesos.