Lo ejecutivos de finanzas señalaron que la economía mexicana enfrentará debilidad económica en el siguiente par de años y el gobierno federal debería de revisar algunas políticas públicas para conseguir mejores resultados.
El presidente del Instituto Mexicano de Ejecutivos de Finanzas (IMEF), Fernando López Macari, apuntó que para los siguientes dos años se espera un crecimiento menor al 2 por ciento. “Para el 2020 esperamos un crecimiento de 1 por ciento y para el 2021 de 1.5 por ciento, se prevé una mejoría modesta y no suficiente para superar un entorno de debilidad en la economía”.
Agregó que los primeros meses del año entrante serán muy importantes para el desempeño económico y las perspectivas de crecimiento, especialmente si lo negociado en el T-MEC es suficiente para impulsar la inversión privada, especialmente en las pequeñas y medianas (pymes), que son las impulsoras en la generación de empleo, así como lo hecho en la seguridad, temas claves para la reactivación económica sólida y duradera.
El vicepresidente del Comité Nacional de Estudios Económicos, Mario Correa Martínez, consideró que un año de cero crecimiento es un año perdido para la actividad económica, y para revertirlo se deben atacar de manera sólida la inseguridad, respeto a los contratos de personas físicas y morales, así como una revisión a la política de salarios a los funcionarios públicos, ya que se ha perdido talento por la política de austeridad en contra de la “burocracia dorada”.
Sobre el tema del incremento al salario mínimo advirtieron tres efectos para el año entrante: disminución de márgenes de ganancia en las empresas, despido de empleados y/o mayor informalidad por el incremento en el costo de mano de obra, coincidieron los especialistas del IMEF.
López Macari señaló sobre la corrupción y sus impactos en la actividad económica “el IMEF no cuenta con datos y análisis para poder asegurar sus resultados” en los negocios.
El IMEF para este año prevé un crecimiento de 0.00 por ciento, un tipo de cambio de 19.52 pesos por dólar y una inflación de 3 por ciento. Al inicio de año se tenía un pronóstico de crecimiento de 1.70 por ciento.