El Banco de México (Banxico) afirmó que la economía mexicana se encuentra preparada para enfrentar choques externos o de otra naturaleza por la fortaleza institucional y macroeconómica del país.
El gobernador del banco central, Alejandro Díaz de León, en una reunión de trabajo con la Comisión de Hacienda y Crédito Público del Senado de la República, indicó que la economía del país presenta un escenario de inflación convergente a la meta de la institución hacia el primer trimestre del 2019.
Destacó que el tipo de cambio flexible “le ha servido muy bien, que sea una variable de ajuste y que contribuya a amortiguar ante los diferentes choques externos, a veces puede sobre reaccionar o considerar que así pasa, pero refleja dos elementos: los fundamentales macroeconómicos y una prima de riesgo asociada a éstos, a veces esta prima puede incrementarse por declaraciones y después conforme disminuyen se ve una apreciación”.
Detalló que la política monetaria en las economías emergentes enfrenta retos importantes por la aceleración de la normalización de política monetaria de Estados Unidos a una mayor velocidad que presionará los flujos de capital, así como una revisión de los acuerdos comerciales a nivel global y comercial.
“Hasta ahora, el reforzamiento del marco macroeconómico de la economía mexicana ha contribuido a que esta continúe creciendo a pesar de la severidad y simultaneidad de los diversos choques que ha enfrentado. No obstante, aún enfrenta retos de corto y mediano plazo, por lo cual es necesario propiciar acciones que promuevan una mayor productividad en la economía”.
Además, agregó que hay muchos elementos de fortaleza en las instituciones, estabilidad de las finanzas públicas, una solvencia en el sistema financiero y una política monetaria que busca el bienestar de la población con la protección del poder adquisitivo.
“Los elementos están dados para tener un tránsito adecuado en un entorno que puede tener volatilidad externa o de otras índoles,” concluyó el gobernador de Banxico.