Con la ratificación de Victoria Rodríguez Ceja, como integrante de la junta de gobierno del Banco de México (Banxico) y ser la primera gobernadora del banco central se acude nuevamente a la idea de vulnerar la autonomía del banco central, lo cual las votaciones demuestran lo contrario.
Los propuestos por el jefe del Ejecutivo, Gerardo Esquivel Hernández, Jonathan Heath Constable y Galia Borja Gómez, que se supone deberían de estar a favor de las cuestiones financieras que más favorezcan a los intereses del gobierno federal presidido por Andrés Manuel López Obrador sin importar las cuestiones técnicas no lo han hecho así, y siempre argumentan sus posturas en las decisiones de política económica.
Heath Cosntable en sus tweets reconoce que los efectos transitorios de la inflación no son tan transitorios y sin embargo, expresa que la tasa de objetivo es un elemento central para la credibilidad del sistema financiero en México.
Esquivel Hernández casi siempre vota en contra de los aumentos de la tasa porque advierte que no sirve de mucho el incremento en un ambiente mundial de alta inflación y que eso podría tener repercusiones a futuro cuando se tenga que disminuir.
Borja Gómez en una votación sorprendió al adherirse a la mayoría por un incremento de un cuarto de punto y sólo en contra Esquivel Hernández.
En algún momento se especuló que con la llegada de Gutiérrez Herrera también se podría tener un tono “paloma” con decisiones que pudieran verse influenciadas por cuestiones políticas ante la cercanía con el presidente de la República.
La autonomía del Banco de México que data desde 1993 en los diferentes momentos económicos de la vida del país no ha sido cuestionada por sus nombramientos y decisiones, pero ahora con el cambio de gobierno que busca impulsar nuevos cuadros alejados de los intereses dominantes se cuestiona a priori la capacidad técnica y profesional para desempeñar las tareas encomendadas.
Hasta ahora las decisiones de Banco de México son respetadas por su imparcialidad y en ningún momento se coquetea con que respondan a intereses del gobierno federal a pesar de las presiones mediáticas como la entrega de remanentes de manera anticipada, que el mismo Esquivel dijo que no era posible porque no los hubo de acuerdo con el marco legal del banco central.
Al gobierno federal a la fecha se le reconoce por calificadoras por su manejo prudente de la política fiscal y monetaria en esta etapa complicada etapa de la pandemia y post pandemia, por algo será.