Las señales sobre las nuevas políticas del nuevo gobierno no muestran claridad sobre el rumbo que tomará la actividad económica, y los agentes económicos se encuentran en la incertidumbre, advirtió el sector privado.
El Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP) especificó que la
cancelación del proyecto del aeropuerto de Texcoco, la política comercial propuesta en materia de petrolera y la idea de modificar el artículo 35 de la Constitución en cuanto a las consultas públicas, evidentemente son temas que monitorean los mercados y en algún momento pueden generar cautela en la inversión que llega a México.
“El comportamiento del mercado cambiario y las tasas de interés han reflejado este entorno, y ahora que se dio a conocer una iniciativa que prohíbe a los bancos cobrar comisiones en diversos servicios, volvió a reflejarse en la actividad financiera”.
El día que se dio conocer la propuesta en el Senado para prohibir algunos cobros en las comisiones bancarias, el tipo de cambio cerró operaciones por arriba de los 20 pesos, después de que comenzaba a moderar su comportamiento por los eventos de la semana previa relacionados con la cancelación del proyecto del nuevo aeropuerto.
“Lo preocupante es que esto se relaciona nuevamente con una posible política de fijación de precios estratégicos para la actividad económica, que como ya lo hemos señalado, implicaría serios desequilibrios para el mercado, propiciando efectos tan negativos que terminarían afectando a los que menos tienen”.
Para aminorar las tensiones generadas por la propuesta de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), por la tarde el equipo de transición de la SHCP emitió un comunicado en el que señaló que “el cambio de administración ha generado un gran entusiasmo en un amplio número de actores de la sociedad mexicana, incluyendo a los legisladores”, lo cual ha derivado “en un gran número de iniciativas de carácter fiscal y financiero”.
Sin embargo, evidencia la falta de comunicación entre el Legislativo y el equipo del nuevo gobierno.
“No hay duda de la importancia en la independencia de los poderes, pero es fundamental fortalecer los canales de comunicación entre ellos, de tal manera que haya claridad en todas las propuestas que se hagan sobre políticas económicas, para que estén alineadas al mismo objetivo de beneficio de las familias. De esta manera la confianza de los mercados se fortalece y se consolida como incentivo para la inversión ante un entorno de reglas claras”.
Aunque la toma de posesión de la Presidencia de la República se realiza el 01 de Diciembre, su equipo en el Congreso, ya en funciones, es el que ha trabajado en todos estos temas que han motivado preocupación en los agentes económicos, especificó el CEESP.
La opinión general se refleja en la evolución de los pronósticos macroeconómicos de los especialistas del sector privado, que muestran preocupación.
En la última encuesta del Banco de México (Banxico), el pronóstico promedio de crecimiento económico para el 2019 se corrigió a la baja para ubicarse en 2.15 por ciento, porcentaje muy cercano a la estimación para el presente año que fue de 2.12 por ciento y que también se corrigió a la baja.
“Si bien podría ser natural que el año próximo el PIB moderara su ritmo de avance por ser el primero del sexenio, como regularmente pasa, el hecho de que para el 2020 la estimación anticipe un crecimiento de 2.23 por ciento, indica que no hay una percepción de mayor impulso con las políticas económicas propuestas. Incluso se prevé que la tasa de avance promedio del PIB para los próximos 10 años sea de 2.43 por ciento, porcentaje ligeramente por debajo del aumento promedio de 2.5 por ciento de los últimos 24 años”.
En el caso de la inflación, se anticipa que este año concluya en niveles de 4.62 por ciento, después de corregirse por sexta vez de manera consecutiva. Para el 2019 se prevé una inflación anual de 3.80 por ciento y de 3.65 por ciento para el 2020, lo que parece reflejar la percepción de que continuarán las presiones sobre los precios al consumidor, eso podría estar relacionado con presiones sobre el tipo de cambio.
“Es importante que el nuevo gobierno haga una revisión puntual de las políticas públicas que pretende instrumentar, pero acompañadas de un análisis completo de su viabilidad e impactos sobre el crecimiento de la economía y el bienestar de las familias, pues de nada servirá que las buenas intenciones no se reflejen en una disminución de la pobreza y mayor generación de empleos bien remunerados”, concluyó el CEESP.