El regreso a las actividades productivas revelará estragos a la salud mental porque se agudizarán los problemas del desempleo, desigualdad social, oportunidades de ingreso, destacó la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

El maestro en Psicología de la máxima casa de estudios, Ricardo Trujillo Correa, indicó que es verdad que el aislamiento generará ciertos estragos en la salud mental, “pero lo más preocupante vendrá cuando la cuarentena termine, como el estrés del desempleo, la desigualdad social y negocios que están por quebrar”.

Explicó que el hecho de que las personas se mantengan en sus casas no va a generar más problemas de salud mental. “El problema en sí mismo es cómo, a partir de esta crisis en la que nos encontramos, va hacer estallar otro tipo de problemas de desigualdad social, de falta de trabajo y oportunidades”.

Trujillo Correa enfatizó que en momentos de crisis las personas aumentan su sentido de resiliencia, y lo más probable es que sientan miedo, un sentimiento que deja ver que el hombre es adaptable a las circunstancias.

El investigador y académico de la Facultad de Psicología detalló que la salud mental está muy vinculada a la justicia social, por ello, para que la población esté mentalmente sana, no se debe de tomar el coronavirus como un problema individual, sino que debe entenderse como un problema donde se tienen que crear sistemas de apoyos necesarios para que problemas como ansiedad y estrés puedan amortiguarse. “Un sistema social que ataca y que aumenta las desigualdades sociales destruye la salud mental”.

Asimismo, calificó de insensible la afirmación de que las personas van aumentar su depresión por mantenerse dentro de la casa. No se dan cuenta de que hay otros que tienen que salir porque no tienen trabajo, ni un sueldo. “Esa es la verdadera tragedia y el verdadero reto, hay más muertos donde hay una mayor desigualdad social, afecta a los más desfavorecidos. Esto nos debe de llevar a una reflexión profunda acerca de los problemas sociales del país».

En ese contexto, el especialista aclaró que las personas que ya tienen algún trastorno mental no necesariamente empeoran y que los problemas que vendrán van a ser del lado social

“Hay que dejar la comunidad individualizada y abrirnos a otra para generar apoyos, soportes, construir redes y programas sociales que sirvan de soporte”, enfatizó el académico de la UNAM.

Por Miguel Ramirez

Nacido en la CDMX, egresado de la FCP y S de la UNAM. Inicie en 1992 en periodismo tecnológico y después migré a la parte económica y financiera. Aficionado a la NFL y vaquero de corazón. Otros deportes son el Basquet (Knicks), Tenis; fut de Champions League...