El estado actual de las Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Sofomes), se presenta retador en México frente a la disminución de hasta un 40% de fondeo por parte de la banca de desarrollo, como recién informó la Asociación de Sociedades Financieras de Objeto Múltiple (Asofom).
Frente al estancamiento y disminución de capital han buscado nuevas maneras de acceder a financiamiento para disminuir el riesgo de desaparecer en un mercado con mayor demanda de fondeo no tradicional por parte de individuos y empresas.
Una de las opciones para mantener a flote su actividad es la su entrada al mercado de deuda, así como la adopción de criterios ESG para hacerla rentable para las y los inversionistas.
Según palabras de la especialista en ESG, los criterios serán fundamentales no solo para la obtención de financiamiento y confianza, sino para la misma operatividad en el país, frente a una adopción cada vez mayor de lo sostenible y para integrar estos aspectos, las sociedades financieras deben seguir funciones clave.
Las Sofomes pueden optar por incorporar consideraciones ESG en sus propias operaciones y prácticas comerciales. Esto puede incluir la adopción de políticas que promuevan la sostenibilidad ambiental, el compromiso con la comunidad local y la mejora de la gobernanza corporativa.
También cumplir con los requerimientos regulatorios y reporte de transparencia porque las autoridades regulatorias en México han comenzado a implementar cada vez más requisitos relacionados con la sostenibilidad empresarial y en instituciones financieras, incluídas las Sofomes. Esto podría requerir que las Sofomes informen sobre cómo están abordando los criterios ESG en sus operaciones y decisiones de inversión
Asimismo, deberán a comenzar a considerar los factores ESG al evaluar la viabilidad y el riesgo asociado con la concesión de créditos. Esto implica evaluar cómo las prácticas de una empresa solicitante pueden afectar su sostenibilidad y, por lo tanto, su capacidad para cumplir con sus obligaciones financieras.
Los criterios están relacionados también con la imagen de una empresa o entidad financiera y una buena gestión es obligatoria, pues uno de los requisitos fundamentales que inversionistas están solicitando una mejor gestión de imagen, transparencia y gobierno corporativo.
La gestión de estos criterios puede crear nuevas oportunidades en mercados no atendidos, ejemplo de ello es el proporcionar financiamiento a proyectos o empresas que buscan tener impactos positivos en el medio ambiente mediante su operación, lo cual es una inversión a largo plazo frente a los cambios por tratados internacionales, el crecimiento del nearshoring (en donde la búsqueda de empresas que cumplan con ESG se ha vuelto elemental) y mayor seguridad frente a los reguladores financieros.
En el contexto actual donde la conciencia y acción socioambiental son pilares en la gestión empresarial y financiera de grandes entidades nacionales e internacionales. Esto debe ser particularmente atendido por las Sofomes en búsqueda de sobrellevar y aumentar sus operaciones en 2024 con una perspectiva más completa y sostenible frente a un mundo que requiere (y demanda) mayor gestión ESG.
En ILUNKA se contará con un Programa para prepararlas en apego a aspectos ASG y a su vez contamos ya con algunas alianzas dentro del sector para construir una oferta sólida a favor de todas las pymes que acceden a créditos con ellas.